Por Francisco Henao Bolívar
Deportivo Cali afronta días muy pesados, con noticias poco alentadoras en varios frentes que obligan a sus directivos a redoblar esfuerzo para propiciar el regreso de la tranquilidad a la institución.
Malos resultados en lo deportivo, el traslado a otra instancia del acuerdo con los acreedores, la ratificación del técnico Jaime de la Pava que no cayó bien en la hinchada, y las amenazas a los directivos, además de la presencia de un grupo de aficionados en el entrenamiento de ayer para increpar al plantel, hacen parte de un pesado ‘cóctel’ que ha enrarecido el ambiente en la escuadra azucarera.
El presidente del Deportivo Cali, Guido Jaramillo, decidió hablar con El País para tocar todos estos temas, pero sobre todo, para contar la realidad de un equipo que en los últimos años ha sido más noticia por sus afugias económicas, que por sus proezas en la cancha.
¿Cómo tomó el Deportivo Cali el rechazo por parte del Tribunal de Arbitramento del acuerdo con acreedores?
Quisiera aclarar la situación; sabemos de las necesidades financieras del Deportivo Cali y por eso era urgente acogernos a un decreto que nos permitiera una reestructuración empresarial, para honrar las obligaciones con los proveedores y acreedores. Por eso nos acogimos al Decreto 560 y no al 550 que era la otra opción. Una vez presentado el acuerdo con acreedores a través de la Cámara de Comercio, vino la etapa de validación después de unos procesos internos. La Cámara de Comercio nombró un árbitro, que es un juez natural para validarlo. El árbitro consideró que este proceso debería ir a otra instancia, a un juzgado. Eso fue lo que pasó el lunes. Esto no termina aquí, el acuerdo sigue vigente, no cambia nada; ya será el juez quien determine si el acuerdo con los acreedores sigue. Pero el Deportivo Cali sigue blindado.
El fallo del lunes muchos lo tomaron como un revés para el Cali...
Para nada es un revés, es la continuidad de un proceso en otra instancia. La noticia fue malinterpretada por muchos, y por eso hacemos el llamado para que acudan a la fuente. Cuando hay desinformación se puede interpretar mal una noticia. ¿Cuál es el propósito de una ley de reestructuración? Tener el tiempo suficiente para cumplir con esas acreencias.
¿Por qué acudieron a la Ley 560 y no la 550?
Porque la 560 fue creada en la época de la pandemia y permitía que las empresas que se acogían a ella, el proceso fuera más expedito, más rápido. Se nos facilitaba más en esos momentos. Si nos toca acudir a la 550 no hay que tenerle miedo. Todos los equipos en Colombia entraron en ley de reestructuración y tomaron la 550 porque la 560 no estaba vigente.
¿En cuánto tiempo cree que el juez puede avalar el acuerdo con acreedores?
No tenemos precisión porque los juzgados tienen sus tiempos; puede haber más celeridad porque ahora existe la virtualidad que permite que las audiencias sean más frecuentes. Pero un tiempo exacto no lo tenemos, primero debe ir a reparto, saber en qué juzgado quedará radicado, y después toca esperar.
¿Con los acreedores ha habido cumplimiento en los pagos?
Con ellos hemos venido teniendo los pagos; con algunos hemos tenido retrasos porque esto ya es un tema de flujo de caja que no ha tenido los ingresos suficientes para hacer todos los pagos; pero los hemos ido llevando, estamos al día en los laborales. El dinero que va llegando lo vamos distribuyendo para pagar también la operación.
¿El riesgo se mantiene?
El riesgo existe y las alarmas deben estar encendidas. No podemos bajar la guardia. Todos los días trabajamos para conseguir fondos. Hay dos vías para salvar al Cali: una es el fondeo para seguir con el modelo asociativo si así lo decide la asamblea. El fondeo es reemplazar una deuda grande por una más pequeña. La segunda instancia es un inversionista; pero para que venga y aporte debe tener una seguridad jurídica, y la seguridad jurídica se la dan las acciones, y para que hayan acciones tiene que ser una sociedad anónima. Eso lo tendremos que definir con los asociados. La solución del Cali es conseguir recursos.
¿Cali y sus socios están de acuerdo para cambiar estatutos que permita la llegada del inversionista?
Para que llegue un inversionista primero hay que ordenar la casa, y eso es lo que hemos venido haciendo estos dos últimos años. Hemos hecho un esfuerzo enorme ahorrando cerca de 12 mil millones de pesos, algo que se debió haber hecho en administraciones anteriores. La deuda sigue aumentando porque después de la deuda operacional, vienen los gastos financieros y esos sí no han bajado. Si no hay una inyección de capital, no hay nada qué hacer. Hay una deuda enorme que si no tenemos recursos para frenarla, no hay nada qué hacer. Tenemos que vender este año alrededor de cinco millones de dólares en jugadores, pero hasta el momento no se ha dado.
El panorama es desalentadorpara el Cali, a no ser que los socios acepten lo del inversionista...
Nosotros recibimos una deuda de casi 93 mil millones de pesos. Hoy está en 112 mil millones. Los gastos operacionales no han subido, vienen bajando. Cuando uno tiene una empresa que genera utilidad operacional, puede solventar gastos financieros. Como se recibe una deuda tan grande y no hay inyección de capital, la situación se dificulta. Si no ingresamos a una copa internacional, sea Libertadores o Suramericana, los flujos de caja y los estados financieros se van a afectar enormemente. Un ingreso a torneo internacional puede generar 12 mil millones de pesos. Si a eso le sumamos venta de jugadores, salvaríamos el año. Pero primero hay que ordenar la casa.
En lo deportivo, ¿qué los llevó a ratificar a Jaime de la Pava?
Tuvimos una conversación larga con el profe, él nos planteó su propuesta de trabajo, incluso los números que nos mostró son mejores que los que recibió cuando llegó al Cali. Lo que pasa es que con tres derrotas en línea, la gente ve otra cosa. Pero hablamos con él y llegamos a unos acuerdos, él tiene unos compromisos por cumplir con el Cali. Hay un compás de espera no muy largo, y por eso tomamos la decisión; después hablamos con los jugadores, ellos respaldan el trabajo del técnico, dicen que se han cometido errores, pero que ellos pueden sacar al equipo de donde está. Además, ¿quién nos garantiza que el que llegue saca al equipo campeón? Nadie. Para buscar un técnico hay que tener recursos, y eso es lo que nosotros no tenemos ahora; entonces al final, siendo responsables, decidimos continuar con el proceso.
Se dijo que el Cali lo dejó porque no había con qué indemnizarlo...
Eso también hizo parte de la charla, no tenemos el recurso para cubrir el valor de una indemnización. Había que hablar con él, pero también con los jugadores para conocer el sentimiento de ellos.
¿Para el voto de confianza a De la Pava hubo división en el Comité?
Al final es unanimidad. Como en toda junta directiva o grupo, son varias las opiniones. Cada uno puede pensar diferente, pero al final se toma una decisión que todos comparten. La idea es darle un espacio más al profe para que demuestre lo que sabe.
Cuando dice que De la Pava tiene un compromiso con el Cali, ¿quiere decir que él toma la decisión de irse si las cosas no marchan?
Así es, es una decisión muy personal de alguien con criterio que sabe en qué momento debe decidir sobre el tema.
¿Los directivos están amenazados?
Sí, estamos muy preocupados, se han presentado amenazas muy fuertes porque toman un matiz muy violento, de muerte a través de las redes sociales; a cada uno de nosotros nos han llegado amenazas directas, hablan de muerte. Algunos directivos están en sus casas por recomendación de la Policía. Un grupo de hinchas fue el martes a Pance a manifestar su inconformidad, por fortuna no pasó a mayores. Esperamos que esto se calme, llamamos a la unidad para sacar al Cali adelante. Los hinchas nos han demostrado que quieren al equipo, entonces no se puede convertir esto en una batalla. Recibimos una carga enorme en lo financiero y estamos trabajando para solucionarlo.
¿Tienen acompañamiento de la Policía?
Hemos estado hablando con las autoridades porque el tema preocupa; se han filtrado los números telefónicos de los directivos y las direcciones de residencia; nos hablan de la familia, de los movimientos de las esposas e hijos, entonces esas cosas desestabilizan. Invito a que no tomemos esto como un problema personal, estamos dedicándole todo el tiempo al equipo que queremos.