Una vez más el exfutbolista Fredy Guarín salió la luz pública a revelar hechos inéditos de su vida. Uno de ellos fue que tocó el abismo que por poco lo lleva a un final sin retorno, ese que relató en medio de lágrimas, pues recuerda que se estaba llevando por delante a su expareja, sus hijos y toda su familia.

Muchos han sido los escándalos en los que se ha visto inmerso en los últimos Fredy Guarín, uno de ellos muy sonado cuando se iba a dar puños con sus padres, en un caso de violencia intrafamiliar, por la que la policía tuvo que intervenir. Todo porque no encontraba rumbo en su vida, esa que estaba llegando a su final.

Y por si fuera poco, el alcohol lo consumió por completo, llevándolo a comer locuras que casi acaban con su vida. Por fortuna estos hechos son cosa del pasado.

Fredy Guarín hoy en día cambió su vida, ahora su cuerpo es atlético. | Foto: El País

Hoy en día Fredy Guarín es un ejemplo de perseverancia, de lucha, de que se puede salir adelante y ya lleva más de seis meses sin consumir licor.

Sin embargo, en medio de su turbulenta vida, Guarín vivió un momento con el que sobrepasó todos los límites, durante la pandemia en el 2020, mientras jugaba en Brasil para el Vasco da Gama, justo cuando la competencia estaba detenida por el Covid-19 y su soledad lo llevó a las exageraciones.

“No había temor. Estaba con cualquier chica en Brasil. Me abandoné por completo. Estaba borracho. Me iba para la favela a buscar peligro”, reveló Fredy Guarín en una conmovedora entrevista para Los Informantes.

En la misma crónica, Guarín reveló que un día, mientras “vivía en un piso 17 y en ese momento me desconecté de la vida, de todo. Mi reacción fue mandarme (por el balcón) ... Había una malla en el balcón. Salté y me devolvió... Obviamente, inconsciente de lo que estaba haciendo y no sé qué pasó”, confesó en medio del llanto.

Fredy Guarín militó en grandes clubes de Europa, entre ellos el Inter de Milán. | Foto: Getty Images

Hoy en día, Guarín es una persona regenerada, con el firme objetivo de no volver a caer, pues “este es un propósito que Dios me está poniendo, de los otros que sé que van a llegar a muchos rincones del mundo, que van a tocar corazones y de seguro van a salvar vidas”.