La Federación Colombiana de Fútbol emitió en las primeras horas de este martes su primer comunicado luego de conocerse lo sucedido con su presidente Ramón Jesurún en la final de la Copa América 2024 disputada en el Hard Rock Stadium de Miami.
Según indicaron, los hechos se dieron durante la ceremonia de premiación tras terminar el partido; allí, según la Federación, “empleados de la seguridad privada del estadio, impidieron el acceso oportuno y directo a la gramilla a la mayoría de integrantes de la delegación colombiana, a pesar de estar debidamente identificados con la escarapela oficial de la organización, lo que generó el reclamo de algunos de manera vehemente, porque la premiación empezaría en minutos”.
Asimismo, la entidad indicó que en medio de la discusión, hubo intercambio de gritos y una de las personas que estuvo allí fue Jamil Jesurún, hijo de Ramón, quien fue agredido, según la FCF, por una de las personas de seguridad.
“Uno de los reproches fue vociferado por un familiar del presidente de la FCF. Sin embargo, la respuesta de uno de los guardias fue una maniobra con la mano que en segundos desató agresiones, y momentos de alta confusión”, dijo la Federación en su comunicado.
Además, la FCF señaló que Jesurún padre “terminó desbordado” tras observar que su hijo había sido reducido por los uniformados, lo que provocó que el altercado pasara a mayores.
“El presidente de la Federación, Ramón Jesurún impulsado por su instinto paternal, pues uno de los reclamantes y posteriormente reducido por los guardias fue su hijo Ramón Jamil, se apresuró a reclamar por lo sucedido, pero terminó desbordado por la situación, al encontrarse en el corredor con su esposa, hijos, hijas y nietos menores de edad”, explicó la entidad rectora del fútbol colombiano.
Y en cuanto a los sucesos ocurridos minutos antes de la premiación a los campeones y subcampeones, sostienen que fue un episodio desafortunado, razón por la cual pidieron excusas a la organización. Sin embargo, hicieron la claridad de que se trató de un gesto con el que buscaba proteger tanto a su hijo como a su familia.
“El presidente y su familiar fueron remitidos a presentarse ante la autoridad competente y explicar en dicho escenario judicial y pertinente lo sucedido. Lamentamos como organización rectora del fútbol colombiano este suceso y ofrecemos excusas a los organizadores del certamen, el país anfitrión y a las personas que se vieron afectadas. Por su parte, el presidente Jesurún lamenta profundamente estos hechos, que jamás debieron ocurrir y que derivaron en una maniobra paternal e instintiva de protección a su hijo y a su familia”, concluyó la FCF.