Cuando la mayoría de adolescentes apenas sueñan con jugar al fútbol en un recreo, Kendry Páez rompe récords. En su segundo juego con la selección de Ecuador sacudió a Sudamérica al convertirse en el jugador más joven en anotar en una eliminatoria.
Como un vendaval, Páez desbordó el costado derecho, se adelantó al rival y con un tiro de izquierda marcó historia.
El primer gol de Ecuador ante Bolivia, a la que terminó derrotando por 2-1, elevó al joven a los altares del fútbol ecuatoriano y sudamericano a los 16 años y 161 días.
Hasta ahora, la marca estaba en manos del paraguayo Gustavo Neffa, quien a sus 17 años y 10 meses hizo un gol ante Ecuador el 24 de septiembre de 1989.
Páez, como las joyas preciosas, se ha forjado bajo presión y abrigado por entrenadores que vieron su claridad para definir, lo que le valió jugar el Mundial Sub-17, ser convocado para la Sub-20 y luego por “matagigantes” Independiente del Valle.
Este es el diamante en bruto que tiene los ecuatorianos
Con Páez dentro del equipo, la selección “cambia su sistema de juego, no es solamente un jugador, es un equipo fuerte, veloz, arrollador”, comenta a la AFP Polo Carrera, exjugador y exseleccionador de la “tricolor”.
La juventud del volante ofensivo causaba resistencia y hasta rechazo en Ecuador, que desde la clasificatoria pasada viene renovando su escuadra con hombres como Moisés Caicedo, Pervis Estupiñán, Piero Hincapié o Gonzalo Plata.
Párez nació en Guayaquil un 4 de mayo del 2007, jugando al fútbol desde temprana edad, pero jamás se esperó que a los 16 años fuera comprado por el Chelsea de Inglaterra, pero tendrá que esperar hasta la mayoría de edad para cumplir su sueño de jugar en Europa.
Con 15 años se convirtió en el futbolista más joven en disputar la Copa Libertadores. A su edad ya cuenta con títulos profesionales con el Independiente del Valle: ganó la Recopa y la Supercopa de Ecuador.
Este año jugó el Mundial Sub-20 en Argentina y allí impuso otro récord: al disputar los cuatro partidos que jugó Ecuador pudo marcar un gol, ante Fijo, hecho que lo convirtió a sus 16 años y 22 días, en el jugador más joven en marcar en un Mundial de esta categoría.
“Lo que hizo Kendry Páez ayer fue callar muchas bocas, había mucha resistencia a que un jugador tan joven de 16 años sea el titular de la selección”, apuntó Dávila.
“Tiene todo el camino por recorrer”, anotó.
Páez no es solo el más joven en marcar en una eliminatoria de Conmebol, sino que en su debut ante Uruguay se convirtió en el futbolista ecuatoriano de menor edad en jugar con la selección mayor.
“Ojalá tengamos más Kendry a futuro en la selección”, expresa Dávila y agrega que el jugador debe aprender todavía a soltar el balón y “pulir su media distancia porque tiene un gran potencial”.
Kendry tendrá un nuevo reto el martes, enfrentará con Ecuador a la Selección Colombia, por lo que el técnico de la Tricolor, Néstor Lorenzo, no debe fiarse de la edad del ecuatoriano Kendry Páez, sino del estupendo talento que tiene, ese que inquieta a los rivales.