Llegó el día más esperado para el mundo del boxeo en el 2017. El sábado, Floyd Mayweather y Conor McGregor se medirán en el T-Mobile Arena en el combate que ha llamado la atención de todos, no solo porque es el regreso del mejor boxeador de los últimos tiempos después de dos años, sino porque trae además al mejor luchador de artes marciales mixtas consigo.
Como la pelea del milenio ha sido catalogado el combate, que aunque en un principio fue muy criticado por los amantes puros del deporte, finalmente acaparó toda la atención de propios y extraños. Aunque no estará en juego ningún cinturón, el morbo es suficiente para que todos vayan a ver si Conor es capaz de cumplir todo lo que dijo cuando retó a Mayweather y logró sacarlo de su puesto de rey en retiro para volver a combatir.
La previa al combate estuvo de visita en cuatro ciudades, tres de Estados Unidos y una en Europa. Mayweather y McGregor tuvieron una verdadera guerra dialéctica que en su momento reafirmó el pensamiento de muchos en cuanto a que era una “payasada”.
Durante toda una semana los pugilistas se dedicaron a darle el último toque de morbo al combate, que se podrá ver en todo el mundo y que en los Estados Unidos pretende marcar un nuevo récord en televisión por medio del sistema de pago por ver.
“Voy a ser un animal cuando salga a pelear. Floyd no existirá en el primer round”, fue lo que manifestó el pegador irlandés McGregor, una vez puso pie aquí en Las Vegas.
Hay que recordar que Conor y Floyd no son solo grandes luchadores. Ambos saben cómo es el negocio y explotan su imagen al máximo. Cada palabra, cada gesto o movimiento, tienen como único objetivo llamar la atención y, de paso, el dinero.
Pero por qué tanto interés
Mayweather siempre dijo que para volver a pelear tenía que por lo menos ganar cien millones de dólares libres, y pues parece que lo conseguirá, pero además podría estar recibiendo cerca de trecientos en total por conceptos de derechos de televisión y publicidad. Sin duda, un negocio redondo.
“Tuvieron que buscar un luchador de otro deporte porque ya no había quién intentara ganarme”, dijo.
El lleno en el T-Mobile Arena está garantizado y solo se espera que inicie un combate que, por donde se le mire, concita la atención del mundo amante del deporte.