La FIFA le descontó seis puntos a Canadá en el torneo femenino de fútbol de los Juegos Olímpicos y vetó a tres entrenadores por un año el sábado a raíz de un escándalo de espionaje con drones.
La sorpresiva serie de castigos incluye una multa de 200.000 francos suizos (226.000 dólares) a la Federación de Fútbol de Canadá, en un escándalo que estalló durante los Juegos. Dos asistentes fueron sorprendidos espiando con drones un entrenamiento el miércoles de Nueva Zelanda, su rival en el primer duelo del torneo.
Esta sanción beneficia a la Selección Colombia, que hace parte del mismo grupo y sueña con avanzar a los cuartos de final del torneo.
La entrenadora Bev Priestman, quien llevó al equipo al título olímpico en Tokio en el 2021, ya había sido suspendida por su federación y posteriormente fue removida del torneo olímpico.
Priestman y sus dos ayudantes implicados en el caso, Joseph Lombardi y Jasmine Mander, fueron vetados por un año de cualquier actividad futbolística.
Una sanción de tantos puntos es algo casi sin precedentes en medio de un torneo internacional.
También socava la imagen de la federación canadiense, que colabora estrechamente con la FIFA en la organización de la Copa Mundial de 2026 en Norteamérica.
Las ciudades canadienses de Toronto y Vancouver serán escenario de algunos de los 104 partidos del torneo que se expande a 48 equipos en vez de 32. El Mundial también se jugará en 11 ciudades de Estados Unidos y en tres de México.
La FIFA aceleró el proceso disciplinario al pedirle a sus jueces de apelación que se encargaran del caso.
Los jueces del organismo rector del fútbol mundial encontraron que Priestman y dos de sus asistentes “eran responsables, cada uno, de comportamiento ofensivo y violar los principios del fair play”.
La federación canadiense fue culpada por no garantizar que su personal siguiera las normas del torneo.
Priestman y la federación podrían presentar una apelación a la sanción frente al panel olímpico especial en París del Tribunal de Arbitraje Deportivo en París. Dicha corte se encarga de audiencias y veredictos con carácter de urgente durante los Juegos Olímpicos.
La británica Priestman, de 38 años, fue contratada en 2020 para tomar las riendas de la selección canadiense. Tiene contrato hasta el final del Mundial Femenino de 2027.
Después de darse a conocer el escándalo, Priestman dejó al campeón olímpico vigente días antes de su presentación del miércoles ante Nueva Zelanda. Los directivos de Canadá sospechan que el espionaje ha sido sistemático desde hace años.
Sus dos asistentes fueron enviados de regreso a su país por el supuesto uso de un dron para espiar el entrenamiento de Nueva Zelanda. Canadá ganó el partido 2-1 de la mano del entrenador asistente Andy Spence.
La deducción de puntos, de ser ratificada por el tribunal, no elimina a Canadá del certamen. Podría significar, sin embargo, que el equipo se vea obligado a ganar sus tres partidos del Grupo A y conservar la esperanza de avanzar con tres unidades, posiblemente como segundo lugar.
Canadá se mide el domingo la anfitriona Francia, líder de la llave en Saint-Étienne y el jueves a Colombia en Niza.
*Con información de la AP.