El fútbol vallecaucano, que parecía una inagotable cantera, que surtía permanentemente a los equipos colombianos e incluso a los del exterior con grandes figuras, atraviesa una dura crisis que ya alarma, porque, desde hace unos años, no sale el gran referente del balompié de la región.
Freddy Rincón, Faustino Asprilla, Mario Yepes, Óscar Córdoba, Miguel Calero, el 'Tren' Valencia, Faryd Mondragón, Édison 'Guigo' Mafla, Giovanni Hernández, Hugo Rodallega y Máyer Candelo, para citar a varios de los destacados de los últimos 25 años, dejaron gran huella y en alto el nombre del fútbol vallecaucano por lo que hicieron en clubes nacionales y del exterior.
De ese calibre hace rato el Valle no saca un jugador, más allá de que varios se han destacado en equipos, o han llegado hasta el fútbol europeo como Duván Zapata, Dávinson Sánchez y Yerry Min (los dos últimos del norte del Cauca).
¿Por qué se estancó la cantera vallecaucana?
“El fútbol hoy se volvió un negocio, se priorizó todo por encima del juego. Importa poco lo de abajo, no capacitan a los entrenadores; el directivo no invierte en la formación de sus técnicos y jugadores, pero sí quiere ganar más”, dice Luis Gómez, formador en la Escuela Fútbol Paz, que tiene convenio con Tigres de México.
Gómez, quien fue clave en el proceso de formación de Duván Zapata en el América, aseguró que “pasarán muchos años para que las canteras del Valle vuelvan a ser las de antes. Hoy los 'pelaos' tienen empresarios y se preocupan más por las redes sociales”.
Para Álex Escobar, exjugador del América y técnico, hay muchos errores en los procesos formativos.
“Se acabaron los formadores porque hoy no tienen la paciencia ni el tiempo para hacer trabajos específicos con los 'pelaos'. El fútbol del Valle tiene mucha deficiencia. Hay jugadores que llegan al profesionalismo y no saben parar un balón”, expresó el conocido 'Pibe del Barrio Obrero'.
Señaló Escobar que “hoy no tenemos arqueros como Córdoba, Calero y Mondragón. ¿Por qué? Hay afán y no se trabaja bien. También se prioriza el biotipo por encima del talento”.
El biotipo, además de exámenes que les hacen a las promesas, son trabas que evitan que muchos lleguen al profesionalismo.
Así lo reconoce Édison 'Guigo' Mafla, quien asegura que “en los equipos se están fijando más en la estatura y no debe ser así. El talento no tiene medida o, sino, miremos a Messi, o acá a Arley Betancurt, Déiber Caicedo, Máyer Candelo o David Ferreira. También les hacen unos exámenes y allí determinan que si el muchacho no crece más, entonces lo descartan”.
Señala Mafla que “en los barrios de Cali hay talento por montón, pero de qué sirve si no les dan la oportunidad. Antes buscaban a los muchachos en los barrios, ahora les cobran por estar en divisiones menores... un negocio”.
Alberto Suárez, quien fue entrenador en las canteras del América, dirigió al equipo rojo en la A y ahora está en Envigado, considera que hay que mejorar muchos detalles.
“El Valle sigue siendo potencia, pero a los procesos internos en cada equipo les falta mejorar las respuestas a lo que estamos viviendo. Hay que revisar los procesos desde lo metodológico, porque nos estamos quedando atrás”, aseguró Suárez.
Agregó que “Hace cinco años América era formado por vallecaucanos, pero hoy vemos dos o tres jugadores únicamente. Hace rato no deslumbra un jugador de la región y es porque desde la base se han cometido muchos errores que no se han corregido”.
El presidente de la Liga Vallecaucana de Fútbol, Oweimar Giraldo, entregó un dato alarmante: “El año pasado, la Selección Valle, categoría 2005, quedó eliminada de un triangular clasificatorio. De tres equipos pasaban dos y nosotros quedamos por fuera. Lo increíble es que de ese equipo, nueve muchachos fueron transferidos a Medellín, Nacional, Caldas y Junior”.
Expresó Giraldo que “al Valle llegan muchos jugadores jóvenes de otras regiones; no sé si para los equipos sea más rentable promocionarlos a ellos que a los de esta zona. Lo otro es que mucho de los nuestros se van a otras partes y no culminan bien su proceso de formación. Hace poco vi el clásico entre Cali y América, y en la cancha solo estaban cinco jugadores de la región. Hace rato no sacamos un goleador y eso es alarmante”.
Como alarmante es que tampoco sale un 10 de la talla de Giovanni Hernández, Máyer Candelo o 'Guigo' Mafla, un todoterreno como Rincón, un delantero con la habilidad de Asprilla o un defensa seguro como Mario Yepes.
Revisar los procesos de formación y corregir a tiempo deben ser las prioridades para que el Valle vuelva a ser la gran despensa de jugadores para el fútbol nacional e internacional.
Prevalece el dinero
Una de las causas por las que se pierden muchos jugadores vallecaucanos es que 'los venden' muy jóvenes.
“En la mayoría de los casos, los empresarios o dueños de los equipos priorizan el dinero; los transfieren a otros equipos por una buena suma de dinero, sin importarles el proceso de formación. Muchos de esos 'pelaos' se pierden porque les alteran el cronograma que ya traen con un entrenador”, dijo un técnico que pidió la omisión de su nombre.
Datos
En la titular del Deportivo Cali solo hay tres vallecaucanos: Christian Mafla, Jimmy Congo y Kevin Velasco, teniendo este último un nivel parejo en los partidos de los azucareros.
En América, el lateral Éber Moreno es el único titular. Apenas está comenzando en su carrera futbolística.
En los equipos de la B hay más jugadores vallecaucanos en las nóminas, pero también mucho espacio para los de otras regiones.
El último goleador vallecaucano es Hugo Rodallega, quien juega en Brasil y está más cerca del retiro.