Dicen que de buenas intenciones está hecho el camino al infierno y eso le sucedió a Nacional en el partido de vuelta de los cuartos de final de la Copa Betplay ante Junior.

En los días previos al compromiso, los jugadores y el cuerpo técnico reflejaron positivismo y optimismo pese al 3-0 con el que llegaban por debajo en el marcador al duelo de vuelta.

Sin embargo, en la cancha no pudo encontrar los espacios necesarios para reducir la ventaja y, cuando tuvo la posibilidad falló en la definición. En cambio, Junior fue inteligente y terminó empatando el partido 1-1 y sentenciando la serie 4-1 a su favor.

El verde no aprovechó la semana larga que tuvo de trabajo para corregir las falencias que mostraba en la cancha pese a las dos victorias que sumó en Liga (ante Pasto 3-1 y frente a Alianza 0-2).

Desde los primeros minutos se le vio ansioso, con sus jugadores pecando de individualistas, como por ejemplo Dorlan Pabón que abusó del remate a la portería cuando tenía mejores opciones. Además, Junior dejó correr el reloj y aprovechó cada situación de juego para cortar el partido y hacer tiempo lo que fue sacando de casillas a los futbolistas verdes.

Esas situaciones fueron desesperando a los dirigidos por el técnico Hernán Darío Herrera, quien también lucía impotente en el banco de suplentes, vociferando constantemente y pidiéndole a los jugadores mayor velocidad e intensidad en el juego.

A ese oscuro panorama se sumó la frustración por no abrir el marcador cuando tuvieron la oportunidad de hacerlo y no lo lograron, como al cierre del primer tiempo en una pelota en la que Jéfferson Duque anticipó a su marcador, pero falló en la puntería, y recién comenzando la segunda etapa cuando Dorlan por fin acertó a la portería y la pelota se estrelló en el palo.

Después vendría la estocada definitiva para el conjunto verde, y fue la expulsión de Andrés “El Rifle” Andrade a los 53 minutos, porque 7 minutos después llegó la anotación del conjunto barranquillero en un cabezazo de Nilson Castrillón, que tuvo que ser validado por el VAR.

De ahí en adelante, solo el aliento de la tribuna mantuvo a Nacional en la cancha porque el Junior fue superior y manejó el partido.

Solo sobre el final hubo una leve reacción de Nacional que le alcanzó para estrellar otra pelota en el palo y para que el árbitro pitara un penalti por un agarrón en el área de un defensor juniorista. Cobró Jéfferson Duque y marcó el empate para por lo menos no perder en su estadio.

Al final, Junior tuvo mayores posibilidades de llevarse el partido, pero Kevin Mier lo evitó en un par de mano a manos.

De esta manera, a Nacional se le escapó el objetivo de revalidar el título que había logrado con Alejandro Restrepo y sigue generando incertidumbre para lo que resta de la Liga Betplay-2 y, sobre todo, para su participación internacional en la Copa Libertadores del año entrante.

El próximo encuentro del conjunto verde será este domingo visitando al Unión Magdalena por la octava fecha de la Liga Betplay-2 en la que marcha en la novena posición y en la que su objetivo es también defender el título, pero aún está muy lejos de la versión con la que festejó en el primer semestre .