Gremio e Internacional, los eternos rivales futbolísticos en la ciudad brasileña de Porto Alegre y protagonistas del famoso derbi conocido como "GreNal", tienen desde este lunes en común el positivo para COVID-19 de sus respectivos presidentes.

Tres días después de que el Inter anunciara que su presidente, Marcelo Medeiros, dio positivo en una prueba de coronavirus, el Gremio informó este lunes que su principal dirigente, Romildo Bolzan, también contrajo el COVID-19.

El conjunto tricolor de Porto Alegre agregó que la misma enfermedad le fue diagnosticada el sábado al vicepresidente del Gremio, Marco Bobsin.

En la cúpula del Gremio hay otros dos dirigentes que igualmente dieron positivo para el coronavirus.

Según la dirección del Gremio, mientras que Bolzan se encuentra en buen estado de salud y sin síntomas de la enfermedad pero recluido en cuarentena en su residencia, Bobsin está bajo observación médica en un hospital.

El presidente del Internacional, por su parte, está en cuarentena de 14 días en su residencia desde el lunes pasado, cuando se realizó la prueba que detectó la enfermedad.

Pese a que Medeiros llegó a sentir fiebre y dolor de cabeza al comienzo de la semana, los síntomas desaparecieron y el dirigente del equipo "tricolor" se encuentra bien.

Tanto Gremio como Internacional suspendieron los entrenamientos y actividades de sus equipos profesionales la semana pasada tras la interrupción temporal por coronavirus de los tres torneos que disputaban: la Copa Libertadores, la Copa do Brasil y el Campeonato Gaúcho.

La rivalidad entre los dos equipos más populares de Porto Alegre comenzó en julio de 1909, cuando disputaron el primer clásico, y tuvo su último capítulo el 12 de marzo pasado, cuando ambos sellaron con un empate sin goles su primer enfrentamiento válido por la Copa Libertadores.

Debido a la rivalidad el partido terminó con una trifulca en la cancha y la expulsión de ocho jugadores: cuatro del Gremio (tres veces campeón de la Libertadores) y otros cuatro del Inter (dos veces campeón continental).

El primer dirigente de fútbol de Brasil de baja por coronavirus fue el vicepresidente del Flamengo, Mauricio Gomes de Mattos, cuyo positivo hace dos semanas obligó al vigente campeón de Brasil y de la Libertadores y club más popular del país a someter a exámenes médicos a toda la plantilla.

El técnico rubro-negro, el portugués Jorge Jesus, llegó a ser considerado como un caso sospechoso, aunque tras realizarse tres pruebas, el resultado fue negativo.