Audiodescripción, chalecos con vibración, tabletas táctiles: diversos dispositivos permitirán a aficionados ciegos o sordos seguir las pruebas deportivas junto al resto del público en varios estadios de los Juegos Olímpicos de París-2024.
“La pelota es enviada desde la derecha, entra y sale de la zona pintada [o “llave”] y es el Mónaco el que recupera la pelota. La zona pintada es esa parte rectangular debajo de la canasta”. En el auricular, una voz describe al espectador ciego todo lo que ocurre en el Arena Bercy de la capital francesa.
Con motivo de las finales de la Copa de Francia de básquet, a finales de abril, distintos hinchas ciegos pudieron seguir en la cancha los partidos gracias a esa audiodescripción. Equipados con un aparato especial, pueden así escuchar a un comentarista deportivo que describe las acciones mientras que otra voz completa la experiencia con elementos de descripción visual, todo ello dentro de una experiencia organizada por Optic 2000 antes de los Juegos Olímpicos.
“Habitualmente escuchamos el ambiente, pero no sabemos por qué el público grita”, cuenta Sofiane Ahmad, de 31 años, que gracias a este sistema tecnológico ha podido disfrutar en la grada de los estadios de partidos de rugby o de fútbol, además de competiciones de atletismo.
“Así sientes la energía que se transmite cuando los aficionados gritan todos juntos, se vive en el momento”, se alegra.
Habitualmente, este fan del París Saint-Germain sigue los partidos de su club de fútbol por la radio, donde los comentarios son más descriptivos que en la televisión.
“Construyo en mi cabeza cómo está siendo lo que ocurre en el terreno de juego”, afirma. Antes de perder la vista en un accidente de tráfico cuando tenía 19 años, él mismo jugaba al fútbol.
Ahora practica fútbol adaptado para personas con problemas de visión o privadas de ella. Eso le ha permitido crear una comunidad con aficionados en su misma situación y a menudo siguen juntos los partidos, los que pueden ver algo lo hacen por televisión y los ciegos por la radio: “Es un placer que compartimos”.
Pierre-Marie Micheli, también ciego desde que sufrió un accidente con 25 años, disfruta especialmente viviendo los partidos de rugby mediante la audiodescripción junto a su padre.
“He disfrutado tanto como cuando veía”, asegura este hombre de 37 años, que antes de su accidente practicaba rugby y bicicleta de montaña.
Pudo utilizar también una tableta táctil, con un imán que se desplaza al mismo tiempo que el balón durante un partido de rugby.
“Sentía con mis dedos, en tiempo real, el balón saliendo del campo. Así pude gritar al mismo tiempo que todos los demás”, explica sobre esta herramienta tecnológica, que será utilizada también en los Juegos Olímpicos.
En un ambiente entusiasta, con cánticos y vuvuzelas en el Arena Bercy, Khaled Kharraz, sordo, también pudo disfrutar del básquet gracias a un chaleco que convierte los sonidos en vibraciones conectadas con su espalda.
Con información de AFP