La totalidad de los jugadores del combinado argentino asistieron a la rueda de prensa, donde Lionel Messi fue el portavoz.
La selección argentina de fútbol no hará más declaraciones a la prensa, por haber sido blanco de "acusaciones muy graves" contra Ezequiel Lavezzi, como consumir marihuana, entre otras "faltas de respeto" al plantel, anunció el martes el capitán, Lionel Messi, tras golear a Colombia 3-0.
"Hemos tomado la decisión de no hablar más con la prensa. Obviamente ustedes saben por qué. Hubo muchas acusaciones, muchas faltas de respeto. Las acusaciones que hicieron contra el 'Pocho' (Lavezzi, de fumar marihuana) son muy graves", dijo Messi, en una rueda de prensa rodeado por todo el plantel de 26 futbolistas, en la ciudad de San Juan (oeste de Argentina).
A Lavezzi, del Hebei Fortune de China, un periodista de una radio argentina lo acusó en su cuenta de la red social Twitter de fumar "un porro" en la concentración.
Lavezzi anunció en la misma red que va a iniciar "acciones legales contra Gabriel Anello por sus falsas declaraciones contra mi persona y los graves daños que han generado a mi familia y en mi trabajo".
Messi, autor de un gol y dos asistencias en brillante faena, dijo que los jugadores saben que "muchos de ustedes (los periodistas) no están en ese juego de faltarnos el respeto, porque podés perder, podés ganar, podés jugar bien, jugar mal, pero esto es meterse en la vida personal".
"Si no lo cortamos ahora, no lo cortamos más", dijo el goleador.
Tras la goleada sufrida ante Brasil 3-0 en la clasificatoria sudamericana al Mundial de Rusia-2018 se produjo un aluvión de críticas, pero algunas fueron de tono grosero e insultante de algunos medios que usan con frecuencia ese estilo.
Argentina había quedado afuera de toda clasificación, pero este martes en la fecha 12, con los tres puntos ante Colombia, volvió a la zona de repesca con el ganador de la fase de Oceanía.