Los violentos siguen jugando y ganando los partidos en los estadios colombianos

El caos reinó en medio del clásico vallecaucano entre Deportivo Cali y América, en la Liga colombiana el viernes pasado. Unos aficionados Azucarero generaron pánico en el estadio de Palmaseca peleando entre ellos, el juego se suspendió por 45 minutos, por eso la plaza otra vez será sancionada.

Este tipo de hechos violentos en los estadios de Colombia se está volviendo recurrente, más en este escenario, en donde parece que la ley no impera.

Esta temporada el cuadro Verdiblanco la inició con las puertas cerradas. En las primeras tres jornadas de local el público no podía entrar, luego de que algunos mal llamdos hinchas invadieran la cancha en el partido ante Atlético Junior, además, algunos aficionados le lanzaron objetos al cuerpo arbitral de aquel juego.

Recientemente ante Patriotas, hace quince días, los aficionados intentaron meterse al terreno de juego. El juego estuvo detenido varios minutos y los vándalos fueron controlados.

Por actitudes como estas es que el Estadio Deportivo Cali está sentenciado y será suspendido duramente por la Dimayor, tras los disturbios generados en el clásico de este viernes, que generó no solo pánico en los asistencias, sino también entre los jugadores y los técnicos.

“Se estaba saliendo un poco de control la seguridad y creo que la seguridad es lo primero para nosotros, principalmente en el arco donde yo estaba tiraban objetos”, contó Joel Graterol, el arquero del América.

Por su parte el técnico del rojo, César Farías, confesó que “un hermano está aquí en la ciudad y no pudo venir al estadio”, todo debido a las amenazas que surgieron entorno al juego.

Por su parte ‘El Cocho’ Patiño, técnico interino de los Verdiblanco, indicó que sus jugadores sintieron el temor incluso desde antes del juego, ya que “eso carga bastante. En estos escenarios ellos (los futbolistas) arriesgan sus vidas”.

La ola de desórdenes abarca el territorio nacional

Pero no solo ocurre en Palmaseca. Recientemente en el Pascual Guerrero el partido de América Vs. Junior tuvo que ser detenido por pelea entre los mismos hinchas de La Mecha en la tribuna de norte, luego de varios minutos y la intervención de los jugadores, el cotejo se reanudó.

En el Campín de Bogotá también la hinchada de Millonarios ha tenido roces entre sí. El duelo de este año ante Deportivo Cali, el 23 de marzo, se paró porque unos hinchas saltaron a la pista de atletismo para agredir a otro aficionado, al parecer, del mismo club.

En el mismo escenario los espectadores del Tolima arrancaron sillas y se las lanzaron a los de Santa Fe, por ello el juego también tuvo que ser suspendido parcialmente el 16 de marzo.

Ese mismo día entre aficionados de Millonarios hubo trifulca, pero esta vez en el estadio de Envigado.

Así como estos son muchos los ejemplos que hay, los cuales día a día se vienen incrementando pero a la luz no se ve ninguna solución. ¿Hasta cuándo?