Miguel Ángel Russo es un nombre bastante conocido en todo Sudamérica, incluido en Colombia. El argentino, nacido en Lanús, supo ser jugador y ahora es uno de los técnicos más laureados, donde, incluso, ostenta una Copa Libertadores en su palmarés.
En Colombia genera gratos recuerdos en Millonarios. Con el equipo de la capital de la República se coronó campeón de la Liga 2017-ll ante el clásico rival de la ciudad: Independiente Santa Fe. Hoy, siete años después, en pleno 2024, Russo es el estratega de Rosario Central de su país natal.
Ahora bien, no es un dato menor su paso por Millonarios, y no solo por lo deportivo, sino porque cuando integró la institución ‘azul’ fue diagnosticado con cáncer de próstata (2017) del cual se operó en 2018 e, incluso, se sometió a quimioterapias.
Con una notable mejoría, en cuanto a salud se refiere, Miguel siguió su carrera en varios países. No obstante, en el presente, dirigiendo al ‘canalla’, una imagen dio bastante de qué hablar a nivel mundial. Ocurrió el pasado jueves 4 de abril, cuando Rosario Central recibió a Peñarol, en el estadio Gigante de Arroyito, por Copa Libertadores.
Ese día, las cámaras de la transmisión enfocaron a Russo y tenía un aspecto similar al que tuvo en Millonarios, cuando estaba mejorando de la enfermedad que lo aquejaba en el año 2017.
Por supuesto, cientos de comentarios surgieron en redes sociales para saber si Miguel había tenido alguna recaída o se estaba sometiendo a algún tipo de tratamiento.
En consecuencia, el pasado 9 de abril, el técnico concedió una entrevista a ‘Cadena 3′. En el medio rosarino habló de varias cosas, las cuales incluyen lo deportivo, pero también fue sincero respecto a su estado actual de salud.
“Mi enfermedad requiere siempre atención, no te puedes descuidar. Mi médico es el que más contento está, él ve los estudios a fondo y todo lo que tienes que hacer... tienes que estar observado permanentemente para prevenir cualquier cosa”, dijo Russo.
Luego, agregó: “Estoy contento, tranquilo, y hay que seguir con lo que tenemos que seguir (...) a veces piensas mucho, pude ser algo emocional, pero de salud está todo bien. Los estudios salieron bien. Yo necesito permanentemente controles”.