El último año para el colombiano Nairo Quintana ha sido de total olvido. Desde que se conoció su caso por el uso del tramadol en el Tour de Francia 2022, al ciclista se le han cerrado todo tipo de puertas en cuanto a la posibilidad de regresar a competir en la élite.
Pese a todos los esfuerzos que ha hecho el deportista por subsanar esta gran polémica, varios equipos le han cerrado sus puertas, dejándolo a la deriva en cuanto a lo que será la siguiente temporada en el año 2024.
Con todo este panorama oscuro, se ha conocido en las últimas horas que el colombiano ha pedido a la prensa el no preguntar por su futuro, pues a pesar de dar pistas sobre lo que pasará, no se ha podido entablar una conversación como tal sobre un equipo específico.
“A lo largo de mi carrera deportiva he podido aprovechar y exprimir al máximo, aun sin tener las cualidades o el prototipo perfecto para ganar el Tour de Francia, la Vuelta o El Giro… ese 1.80 con músculos de hierro”, dijo el cafetero en charla con Catalunya Radio.
“Finalmente, con mi cabeza, mis ambiciones, los sueños que siempre tuve, la disciplina y el esfuerzo, pude llegar a ganar cosas muy importantes. Eso me tiene feliz, me tiene satisfecho”, agregó.
Para apagar un poco el incendio que ha generad su futuro y se ha mostrado entrenando fuertemente en suelo europeo, esperando una oportunidad de oro para el siguiente año. “Me hace falta todo un poco. Siempre me ha gustado todo el ámbito de la competición. Tener un dorsal siempre me da mucha más fuerza, me lleva el cuerpo a otro nivel de felicidad y bueno, ahí estamos, preparándonos fuertes”, declaró.
“Llevo media vida fuera de casa, finalmente cuando estás tanto tiempo lejos de casa el mundo es tu casa, tengo amigos por todo el mundo, pero realmente tu casa es donde te sientes bien y nosotros en Andorra nos sentimos muy bien”, admitió.
La reciente visita de Nairo a la Vuelta a España 2023 hizo pensar que las relaciones con la UCI y los equipos había mejorado positivamente, pero lo único que hizo es confirmar que ninguno de los directivos reconocidos lo tienen en mente como una posibilidad para el 2024.
Más allá de la edad y el tiempo de inactividad, que juegan un papel importante para la decisión, a Nairo le pesa el resultado positivo a tramadol en el Tour del año pasado, una sustancia que, luego del escándalo, fue declarada como prohibida por la Agencia Mundial Antidopaje.
Afortunadamente, al no estar prohibida al momento del examen, Nairo no sufrió más sanciones que la descalificación, lo que hace aún más impresionante que esté camino a cumplir año y medio sin equipo siendo uno de los pocos ciclistas activos con Giro de Italia y Vuelta a España en su palmarés.
Desde Europa han negado rotundamente un presunto ‘veto’ contra el colombiano, que cruza los dedos para volver a darle alegrías a Colombia.