Estados Unidos despojó por tercera vez el sueño dorado del Brasil de Marta y se colgó el oro en París-2024 al imponerse 1-0 este sábado en el Parque de los Príncipes, testigo de la despedida olímpica de la “reina” del fútbol.
Se trata de la quinta en ocho ediciones del balompié femenino de los Juegos Olímpicos, la primera desde Londres-2012, que tuvo su estreno en Atlanta-1996.
Tres de esas conquistas tuvieron al mismo equipo y a la misma jugadora como víctimas: Brasil y Marta, en Atenas-2004, Pekín-2008 y ahora París-2024.
Considerada la mejor futbolista de la historia, la legendaria atacante se despidió a los 38 años, con derrota y sin la deseada corona, de sus sextas y últimas justas.
Pero tal vez con el consuelo de haber firmado su nombre en las tres únicas preseas olímpicas, tres platas, de la ‘Canarinha’.
La zurda ingresó en el minuto 61, en su reaparición en la competición francesa tras pagar dos fechas de suspensión, e hizo poco por emparejar la final.
La vieja guardia, vigilante
La cantante italiana Gala y su éxito “Freed from Desire”, entonado también la víspera en la final masculina vencida por España frente a Francia, ambientó el lleno total en el Parque de los Príncipes.
El ‘Team USA’ contó, entre los más de 48.000 espectadores, con el apoyo singular de la estrella de Hollywood Tom Cruise y de embajadoras de la vieja guardia de su laureado balompié, en cabeza de la inmortal Megan Rapinoe, bicampeona mundial (2015, 2019) y ganadora del oro en Londres.
El respaldo ilustre no garantizó que las estadounidenses arrancaran bien, por el contrario, Ludmila madrugó (2) para avisar, en un remate controlado en dos tiempos por Alyssa Naeher, que sería, junto con Gabi Portilho, un tormento para la zaga dispuesta por la laureada técnica británica Emma Hayes.
La pugna, al menos en la primera parte, estuvo marcada por imprecisiones en la entrega y escapadas veloces por las bandas, una de ellas de Swanson (26), enseñó a París los reflejos colosales de la portera brasileña, Lorena.
Su contraparte, Naeher, no se quedó atrás en el descuento (45+2), cuando en una estirada acrobática evitó el tercer tanto en el torneo de Portilho, quien desempolvó un derechazo tras un pase de la capitana Adriana.
La batalla en el césped se correspondía en las tribunas, divididas entre camisas ‘amarelas’ y tricolores estrelladas, con las hinchadas intercambiando gritos de “¡Brasil!” y “¡USA!”.
Horan, la otra ‘10′
En la zona de calentamiento, expectante, Marta esperaba su oportunidad, distante en un principio por causa de la buena labor de las brasileñas para controlar al llamado “Triple problema” (Swanson, Sophia Smith y Trinity Rodman), responsable de anotar diez de los doce goles norteamericanos en el torneo.
Con media hora en el reloj, Elias abrió el armario para dejar salir a su arma no tan secreta: Marta, sustituta de Ludmila.
Pero era la ‘10′ de Estados Unidos, Horan, del Olympique de Lyon, quien movía los hilos en el Parque de los Príncipes, bañado con sol de verano, para el renovado equipo de la laureada Hayes, encargada de hacer olvidar el fiasco en el Mundial de 2023.
Con el oro otra vez en huida, esta vez para siempre, Marta se dedicó a consolar a sus compañeras y a recibir los aplausos de un Parque de los Príncipes que se rindió ante la “reina”.
*Con información de AFP.