Terminó la novena edición de la Copa América Femenina que se realizó en Colombia y que dejó a la Selección de Brasil como campeona por octava ocasión en la historia.
Sin duda la realización del evento continental fue todo un éxito y las tres
sedes (Cali, Armenia y Bucaramanga), estuvieron a la altura de la exigencia de albergar una Copa.
En el caso de nuestro país, la Selección Colombia femenina demostró jerarquía en cada uno de los seis compromisos que disputó.
Desde el primer juego ante Paraguay, hasta el último de la fi nal frente a la siempre compleja Brasil, las nuestras dejaron la piel en la cancha y enamoraron a la fanaticada que estuvo presente de manera incondicional.
Igualmente, aspectos como la exigencia de una Liga Femenina profesional anual, mejores condiciones para las futbolistas locales y la importancia de mantener los procesos que se están llevando a cabo en la Selección, pensando en el recambio generacional, son algunos aspectos que se desprenden luego de la participación de las nuestras y el
subcampeonato obtenido el pasado sábado, en Bucaramanga.
Fuertes en Suramérica
La Selección Colombia femenina cerró el pasado sábado uno de sus mejores performance a nivel continental en todas sus categorías.
Tan solo en estos siete meses que van del 2022, las selecciones sub17, sub20 y absoluta; solo fueron superadas por Brasil en los diferentes suramericanos y Copa América. Además, cada una de ellas logró clasificar a los Mundiales y la de mayores un cupo para los próximos Juegos Olímpicos que se disputarán en París 2024.
Recambio generacional
El proceso Selección Colombia Femenino atraviesa por su mejor momento gracias al recambio generacional que se vive en la
categoría absoluta.
El trabajo de varios años de las Ligas departamentales, la Difútbol y ahora el apoyo de los clubes profesionales que participan en la Liga femenina, han logrado sacar adelante una camada de futbolistas jóvenes de gran proyección como Linda Caicedo, Gabriela Rodríguez,
Karla Torres, Gisela Robledo, entre otras.
Mensajes a directos
El carácter y unión de las futbolistas colombianas puso en aprietos a la dirigencia del fútbol, en nuestro país, quienes estuvieron en el ojo del huracán por la falta de apoyo hacia las jugadoras y la indiferencia
para realizar la Liga femenina en el segundo semestre.
Ahora, el presidente de la FCF, Ramón Jesurún, prometió un campeonato profesional que durará un año para el 2023, pero también pidió el apoyo de la empresa privada para mover recursos.
Fervor del público
Sin duda la hinchada de la Selección Colombia femenina se lleva todo el
aplauso por el apoyo incondicional hacia las jugadoras en cada uno de los seis partidos que disputaron en la Copa América femenina.
Las ciudades de Cali, Armenia y Bucaramanga estuvieron a la altura del evento continental. Los fanáticos alentaron dentro y fuera de las canchas y hasta el último momento demostraron su cariño a cada una de las futbolistas.
Apoyo mediático
Fue tan importante lo hecho por la Selección Colombia en esta Copa América Femenina que logró llevarse los reflectores de los medios de comunicación durante los 22 días de competencia.
El impacto mediático aportó al crecimiento de las futbolistas dentro del panorama deportivo nacional e internacional.
Además, la presencia de medios internacionales ayudó a visibilizar el poco apoyo de las grandes esferas del deporte al
fútbol femenino, en Colombia.