En un compromiso donde se batalló más con los errores propios del equipo que con el rival, Liverpool logró rescatar una victoria ante un Fulham que le propuso un buen fútbol.
Era raro el plan de juego pero algo distinto había que inventar después de los dos golpes en Europa League (eliminado) y en Anfield contra Crystal Palace (0-1).
Díaz iba ahora por derecha y Gakpo por izquierda y como 9 iba Diogo Jota, en un tridente nuevo que pronto daba un resultado, a los 3 minutos tenía el rojo la primera ocasión clara de gol, un cabezazo al gran centro de Alexander-Arnold que salió muy cerca al palo.
Alexander-Arnold en un tiro libre, logró la potencia y ubicación para pasar la barrera y ubicar la pelota al ángulo imposible para Leno y por fin, un gol para borrar los últimos malos días y ganar confianza, algo que necesitaba el equipo dirigido por Klopp.
El empate llegó por la banda izquierda, Van Dijk salió a marcar, como pudo salvó Qansah y apareció Castagne a los 45+2 para meter un remate rastrero que superó a Alisson-Becker y Endo y era el 1-1 que otra vez le metía presión al rojo; empatar era renunciar al título de Premier.
En el complemento, el equipo de Klopp salió más decidido, con los mismos hombres pero otra velocidad, encontró el premio en el menos esperado de todos: dejaron libre a Gravenberch, que hasta ese momento deambulaba, y metió un remate perfecto pegado al palo para 1-2 a los 53 minutos.
Diego Jota a los 72 minutos del compromiso, aumentó el marcador en un remate frontal para superar al arquero del Fulham.
El partido que terminó 3-1 con victoria para los ‘reds’, mantiene a los de Klopp en la pelea por el título de la Premier League, Arsenal y Liverpool cuentan con 74 puntos en 33 partidos, y se ubican primero y segundo en la tabla respectivamente.