Después de muchos años de lucha y fracasos dolorosos en la Copa Davis, Colombia vive momentos de alegría con dos clasificaciones consecutivas a las finales del torneo, que este año, como el pasado, se disputarán en la Caja Mágica de Madrid (España).

En el país, los aficionados al tenis aún saborean las mieles de la histórica victoria ante Argentina, potencia del continente, dada el fin de semana en el Palacio de los Deportes de Bogotá.

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Fue un debut de ensueño para Alejandro Falla como capitán del equipo, además de la confirmación de Daniel Galán como la gran realidad de los sencillos para Colombia.

La localía, la altura de la capital, el impulso que genera el hecho de tener a los mejores doblistas del mundo y las bajas de Argentina fueron algunas de las claves del triunfo. El País analiza el porqué Colombia estará de nuevo en la élite del tenis.

Para Cristian Pinzón, periodista de Caracol Radio, “Colombia venció a Argentina porque tiene a los mejores doblistas del mundo y tiene a un tenista en individuales que sigue creciendo a pasos agigantados como Daniel Galán”.

Pinzón coincide con Gastón Gaudio, capitán del equipo argentino, en que el bumangués Galán tiene un puesto ‘mentiroso’ en el escalafón de la ATP.

“No está muy bien ubicado ni destaca lo suficiente en grandes torneos, pero cada vez que se pone la camiseta de Colombia demuestra ser uno de los tenistas con mayor proyección del continente”, acotó.

El bogotano también considera que la experiencia en las finales de 2019, más allá de que Colombia haya sido eliminado en primera ronda, le sirvió al grupo que viene trabajando junto hace tiempo.

“No se puede desconocer el aporte de Alejandro Falla, porque su experiencia en Copa Davis es muy importante. Él les supo transmitir eso a los jugadores”, concluyó.

En eso coincide el editor del portal Match Tenis, Andrés Vargas. “Falla les inyectó un tema de mentalidad. Siempre dijo que esta iba a ser la vencida, que Colombia iba a vencer a Argentina y les hizo creerse el cuento”.

También coinciden ambos en que Bogotá y su cancha de polvo de ladrillo se han convertido en un fortín en el que Colombia se impone a sus adversarios.

“Si bien Argentina no pudo contar con sus mejores jugadores, supo aprovechar las falencias rivales para ganar”, cerró Pinzón.

Por otro lado, Vargas no duda en declarar que Galán mostró su mejor versión de la historia: “a él le sienta muy bien la altura, juega en su casa porque se entrena acá y eso le ayudó a pasar por encima de los argentinos”.

Eso, sumado a que los doblistas cumplieron con lo que se esperaba de ellos, propició el triunfo ante los gauchos.

La periodista Laura Cuéllar destacó además que el equipo se entrenó muy bien en los días previos. “Todos estaban preparados para jugar, más allá de que se previera quiénes iban a hacerlo”.

Para Cuéllar, el hecho de que Argentina viniera diezmado (sin Pella ni Schwartzman) ayudó a que los colombianos se convencieran de que podían dar el batacazo.

Además, hizo un corto análisis de la gran demostración tenística de Daniel Galán. “Recibió donde tenía que recibir, subió a la red cuando tenía que hacerlo y sacó a Lóndero del partido. De él era el singlista del que más se esperaba y no decepcionó”.

Valoró también el hecho de que tener a los mejores doblistas del mundo motiva a cualquiera, lo cual, aunado al mal momento de algunos tenistas argentinos como Leonardo Mayer, llenó de confianza a los capitaneados por Falla.

¿Cómo se vivió en Argentina?

Para Raúl Daffunchio, periodista argentino, lo hecho por Colombia es “fiel a lo que sucede en la Davis, no hay respeto por ranking ni trayectorias. Argentina jugó condicionado por la altura y por no tener a Schwarzman.

Concluyó que a su país le pasa en el tenis algo parecido con el fútbol. “Tiene buen nivel para el continente, vale más de lo que realmente es y sostiene su prestigio por su historia”.

Pablo Amalfitano (@Amalfitenis), periodista del diario Página/12,  entiende que la serie representa, para Colombia, “uno de los mayores triunfos de su historia en la Davis, que le servirá para desarrollar todavía más el tenis en el país". 

En el caso de Argentina, cree que “la derrota es doble: no jugará en la pelea por la ensaladera y tendrá que disputar una serie para no descender, además del golpe financiero que representa no contar con los 300 mil dólares que reciben las federaciones de los países participantes en la Caja Mágica de Madrid”.

Para Amalfitano, es necesaria una reflexión profunda en torno al tenis argentino. “La de Bogotá fue la primera serie en la que Gaudio se encontró con un desafío de calibre; había jugado con Colombia en San Juan en una serie sin valor real y su equipo no era favorito en las últimas Finales, por lo que el papel que realizó fue aceptable”, concluyó.