Luego de su participación en el M25 en el municipio de Anapoima (Cundinamarca), donde alcanzó las semifinales, el tenista colombiano Nicolás Mejía regresó a la acción, en esta oportunidad lo hizo en el Challenger de Ciudad de México, donde se estrenó con un sólido triunfo, tras vencer por 6-2 y 6-0 al argentino Genaro Alberto Olivieri, luego de una hora y 11 minutos.

El historial nos presentaba dos triunfos del jugador del Equipo Colsanitas en igual número de partidos, ambos se habían resuelto en tres sets, por lo cual se preveía un duelo parejo y cargado de emociones, pero no fue así, pues ‘Nico’ fue amo y señor absoluto del partido. El inicio del partido fue dominado por Olivieri, quien rápidamente se fue arriba por 2-0, a partir de ese instante empezó el dominio de la raqueta cafetera, quien ganó doce juegos al hilo para quedarse con la victoria.

“El arranque de Olivieri fue muy bueno, incluso tuvo opciones para irse arriba por 3-0 con dos quiebres a favor; fue clave para mí haber sacado adelante ese game, a partir de allí me sentí más cómodo, moví la pelota y él empezó a ser más errático con relación al inicio”, fueron las palabras de Nicolás, quien recibió carta de invitación para jugar este certamen.

En busca de los cuartos de final, Mejía se enfrentará este miércoles, en horario a confirmar por parte de la organización al australiano James Duckworth, N.°112 del ranking ATP y quien oficia como el cuarto cabeza de serie en este certamen, siendo este el primer enfrentamiento entre ambos. “Debo jugar muy concentrado ese partido, tengo las condiciones para sacarlo adelante”, fueron las palabras de la segunda raqueta cafetera en el ranking ATP.

Nicolás no es el único colombiano que juega este certamen, también lo hace Daniel Galán, quien venció en su debut al francés Terence Atmane por 6-3 y 6-4; en dobles, la carta colombiana es Cristián Rodríguez, quien forma pareja con el ecuatoriano Diego Hidalgo, siendo su debut en la jornada de este miércoles ante la dupla del mexicano Hans Hach Verdugo y el australiano Luke Saville.