¿Finalizará Nadal el año como N.1 del mundo? ¿Superará Djokovic el récord de Federer? ¿Dará Tsitsipas la sorpresa luego de un año discreto? Los ocho mejores jugadores de la temporada se ven las caras a partir del domingo en el ATP Finals de Turín en busca de poner un broche de oro al curso 2022.
Sólo Carlos Alcaraz, convertido a sus 19 años en el más joven N.1 de la historia de la ATP (desde 1973) después de su título en el US Open en septiembre, se pierde la cita a causa de una lesión en los abdominales sufrida en el Masters 1000 de París.
El puesto de N.1
La ausencia de Alcaraz abre una pequeña puerta para que Rafael Nadal (2º) o Stefanos Tsitsipas (3º) puedan acabar el año en el número 1 mundial.
El griego de 24 años, que ocupa la mejor clasificación de su carrera, debe ganar la competición sin perder ni un solo partido (cinco victorias seguidas).
El español regresaría al N.1 con 36 años si conquista un torneo que nunca ah ganado o si permanece invicto hasta la final, a condición de no perderla ante un Tsitsipas que llegaría invicto.
Si no se produce ninguno de los dos escenarios Alcaraz terminará el año como N.1 del mundo.
Para Nadal es la ocasión de terminar una sexta temporada en la cúspide del tenis mundial (después de 2008, 2010, 2013, 2017, 2019), igualando a Pete Sampras. Sólo Novak Djokovic puede presumir de superar esa cifra (7).
Pero el poseedor del récord de más torneos de Grand Slam en su palmarés (22) nunca ha ganado el Masters de fin de año en diez participaciones (desde 2005) a pesar de sus dos finales jugadas (2010, 2013).
Tsitsipas ha disputado siete finales este año (entre ellas las de los Masters 1000 de Roma y Cincinnati) pero sólo ha ganado dos: Montecarlo y Mallorca. En los 'Grandes', luego de su semifinal en Melbourne, decepcionó en octavos de Roland-Garros, en 3ª ronda en Wimbledon y en 1ª ronda en el US Open.
Así pues, conquistar el Masters por segunda vez en su carrera (después de 2019) daría lustre a su temporada.
A igualar a Federer
Vencedor en Wimbledon antes de un largo parón durante la gira norteamericana estival debido a su negativa a vacunarse contra el covid-19, el serbio Djokovic se impuso después en Tel Aviv y en Astaná antes de perder la final del Masters 1000 de París. Octavo en el ranking mundial, no esconde su hambre de victorias.
"Trato de conquistar todos los torneos que juego, no es un secreto, y con esa mentalidad vengo a Turín", había afirmado después de su inesperada derrota en la final de Bercy ante el joven noruego Holger Rune.
Además de añadir un 91º título a su palmarés y demostrar ante las mejores raquetas masculinas del mundo que es mejor de lo que indica su clasificación actual, 'Nole' aspira al récord de seis títulos en el Masters de fin de año que ostenta Federer.
Despedida con buen sabor de boca
Un poco a la imagen de Tsitsipas, los rusos Andrey Rublev y Daniil Medvedev buscan un título que les sirva para despedir la temporada con buen sabor de boca.
Medvedev alcanzó en febrero el N.1 del mundo. Pero entre una final en el Abierto de Australia y una prohibición de jugar en Wimbledon como a todos los jugadores rusos y bielorrusos como consecuencia de la guerra de Ucrania, descendió al quinto puesto con sólo dos títulos en su palmarés (Los Cabos y Viena).
Rublev (7º), por su parte, ha ganado cuatro torneos (Marsella, Dubái, Belgrado, Gijón) pero sueña aún con un gran título.
La guinda
Para los tres últimos participantes, al contrario, este Masters asemeja a una guinda sobre el pastel, que coronaría una temporada ya de por sí exitosa.
El noruego Casper Ruud (4º) alcanzó en dos ocasiones la final de un Grand Slam, en Roland Garros y en el US Open, donde demostró que su juego podía ser temible en otras superficies además de la tierra batida.
El canadiense Félix Auger-Alissime (6º) sacó a relucir al fin su clase al final de temporada encadenando tres títulos en otras tantas semanas (Florencia, Amberes, Basilea), antes de caer en semifinales en Bercy.
Taylor Fritz (9º), se benefició de la baja de Alcaraz para participar en el torneo, mientras que Holger Rune, ganador del Masters 1000 de París, es ahora el primer situado en caso de ausencia de cualquiera de los ocho clasificados.