La seguridad fue reforzada en el Camp des Loges, el centro de entrenamiento del PSG, y delante del domicilio de los jugadores que fueron objeto el miércoles de los insultos de los aficionados, Neymar, Lionel Messi y Marco Verrati, informó a la AFP este jueves una fuente conocedora de esas medidas.
El miércoles por la tarde, varios centenares de aficionados –la mayoría denominados ultra– se congregaron delante de la sede del PSG en Boulogne-Billancourt para manifestar su descontento por los resultados del club, insultando a algunos jugadores como Marco Verratti, Leo Messi, Neymar y el técnico Christophe Galtier.
Algunos de ellos –un centenar de personas vestidas de negro– también se congregaron el miércoles delante del domicilio de Neymar, lesionado hasta final de temporada, en Bougival (periferia de París), entonando cánticos hostiles como ‘Neymar, lárgate”, indicó a la AFP una de las fuentes cercanas, precisando que algunos expresaron su deseo de “querer repetir” su acción todas las tardes.
Los manifestantes se dispersaron “de forma tranquila unos minutos después de su llegada”, sin “ninguna voluntad de enfrentamiento con la Policía”.
“No dejen que la gente les meta en su tempestad, metedles en vuestra paz”, escribió el brasileño el miércoles en lengua portuguesa en Instagram.
A raíz de esos hechos, el PSG decidió reforzar la seguridad, especialmente con un incremento del personal de vigilancia del centro de entrenamiento del club, y delante de las casas de Neymar, Messi y Verratti, los tres blanco de los cánticos hostiles, informó a la AFP otra de las fuentes.
“El París Saint-Germain condena con la mayor firmeza los actos intolerables e insultantes de un pequeño grupo de individuos que tuvieron lugar el miércoles”, reaccionó el club por medio de un comunicado difundido el miércoles por la noche.
“Sean cuales sean las discrepancias, nada puede justificar tales actos. El club aporta todo su apoyo a sus jugadores, a su dirección y a todas las personas afectadas por esos comportamientos vergonzosos”, proseguía el comunicado.
Esos hechos acontecieron tres días después de la derrota contra el Lorient en el Parque de los Príncipes (1-3), la tercera del club parisino en los cuatro últimos partidos en casa.
“Estamos sinceramente preocupados en relación al futuro y a la sostenibilidad de nuestro club”, lamentó el miércoles en un comunicado el Collectif Ultras Paris (CUP), preguntándose “si hay aún un piloto en el avión”.
“El mensaje que queremos expresar es que la temporada es ridícula. Desde que el mercado de invierno fue completamente fallido hasta las prestaciones sobre el terreno de juego, tenemos jugadores que no luchan por nuestros colores, que no respetan al club”, explicó el miércoles a la AFP un aficionado, Evan Sarna.
El PSG abrió el martes un procedimiento disciplinario contra su estrella argentina, que será suspendida varios días después de un viaje a Arabia Saudita realizado sin el consentimiento del club.
La suspensión de Messi por el París Saint-Germain parece rubricar el decepcionante paso del astro argentino por la capital francesa, donde durante dos temporadas su brillo ha sido intermitente, llegando incluso a ser rechiflado por el público del Parque de los Príncipes.
Según se iban sucediendo los pobres resultados deportivos del PSG esta temporada, el jugador parecía cada vez menos implicado en el juego del equipo, caminando sobre el césped, falto de intensidad. Ni siquiera sus chispazos de genio eclipsaron esa tendencia a ojos de la afición.
Con Messi, el PSG parecía destinado a dar al fin un paso adelante en la Liga de Campeones. Sin embargo, el club cayó en dos ocasiones seguidas en octavos de final, lo que más bien fue percibido como un paso atrás.
*Con información de la AFP.