A la hora de formar son muchos los valores que entran en juego. En el caso del entrenador, Valentín Gamboa, una de las virtudes que más lo identifica es la visión que tiene a la hora de observar, seguir y seleccionar a los atletas de Colombia.
Oriundo del corregimiento de Tutunendo, en Chocó, de sus 76 años de vida lleva por lo menos 50 descubriendo a los talentos del atletismo en el país. Hoy, con la sabiduría y experiencia que solo entregan los calendarios marcados, y cientos de historias para contar, continúa con esta loable labor.
"En los eventos nacionales los entrenadores empezamos a observar a los muchachos, sus capacidades, lo que tienen en la pista, para que, posteriormente, comiencen un entrenamiento más riguroso que determinen sus condiciones y si llegan o no", advierte Gamboa.
También revela que muchos "vienen sin muchas condiciones técnicas, pero así comienzan los atletas en el mundo". Y pone un ejemplo más que contundente: "Anthony Zambrano arrancó de esa manera".
Y es que ahora que Colombia se alista a recibir el Mundial de Atletismo Sub-20 de Cali entre el 1 y 6 de agosto, le viene a su envidiable memoria la cita orbital de menores que también se celebró en el Pascual Guerrero de la capital vallecaucana, en 2015.
Justamente, en ese campeonato, el nombre de Anthony Zambrano sobresalió. Ya venía de hacer con éxito el proceso en Supérate Intercolegiados y ratificó sus condiciones al alcanzar la final en la prueba de los 400 metros planos, su especialidad.
"Él asistió a un evento en Cali, de una categoría menores, y yo lo vi corriendo 49 (segundos) en 400 (metros), que para la edad que tenía era muy bueno. Fue ahí cuando lo captamos", recuerda Valentín.
"Ya en el Mundial, cuando llega a la final, algo sorprendente para alguien que no había sido ni campeón nacional, dijimos: este es el hombre que hay que llevar. La Federación de Atletismo me escuchó y lo concentramos en Bogotá para empezar a potenciarlo más; se inició con entrenamientos avanzados, asistencias médicas, fisiológicas, ergogénicas y alimentarias", agrega sobre el proceso de Zambrano.
Desde entonces, el atleta guajiro comenzó a escribir su historia sobre la pista y con una carrera a la que todavía le falta camino, ya ha sido campeón panamericano en 2019 (Lima), subcampeón en el Mundial de Atletismo 2019 (Doha) y una histórica plata en los Juegos Olímpicos 2020 (Tokio).
Por eso Gamboa resalta la importancia de los mundiales juveniles, como el que organiza nuestro país desde este lunes con la participación de 2.500 atletas y oficiales de 175 países, para el que ha elegido una nómina de 33 atletas. En ellos, según él, no solo surgen nuevos valores, sino que también permiten medir las posibilidades respecto a otros países del mundo.
"Independientemente de que ganen o no, allí avizoramos lo que se puede hacer con nuestros atletas. Se les mira la forma de desplazarse, de comportarse y de cómo están psicológicamente", expresa el jefe de entrenadores de Colombia para el certamen.
Y sobre el Mundial de Cali en sí, Gamboa prefiere no mencionar nombres sino hablar de la selección. Es enfático en que es una nueva oportunidad para seguirle la huella a los deportistas que participarán y que se pueden perfilar como las futuras figuras de Colombia.
"Este Mundial le da un salto de calidad al atletismo colombiano. A buena hora llega este y otros eventos para estar atentos y seguir mirando, no tanto por el resultado, sino cómo los atletas se comportan técnica y físicamente; allí vamos a visibilizar quién puede llegar a ser sobresalir", afirma.
Respecto a los atletas que van llegando, Valentín dice que, en principio, no se hace una evaluación científica, pero se les ha observado la facilidad desplazamiento en la pista, su crecimiento, desarrollo respecto a la edad y se les ha captado la habilidad dentro del campo.
El momento que vive Colombia en el atletismo es de los más prometedores en la historia, por lo que Gamboa asegura que, gracias al trabajo articulado con el Ministerio del Deporte, se vienen descubriendo talentos en todas las regiones del país. Ejemplo de ello son los buenos resultados obtenidos en los Panamericanos Junior de Cali 2021 y los Bolivarianos de Valledupar 2022.
"Lo que se ha hecho con los programas de Mindeporte es importante, ir y "esculcar" en todos los rincones del territorio nacional para trabajar con estos muchachos, seguirles el rastro y traerlos para sacar buenos deportistas", concluye.