El Manchester City se impuso en los últimos minutos en su visita al Tottenham, este viernes (26 de enero) en la cuarta ronda de la FA Cup, donde Chelsea y Aston Villa empataron sin goles y deberán repetir su duelo.
Para el Manchester City, la agónica victoria le permitió romper una particular maldición, ya que hasta ahora no había nunca ganado, y ni siquiera marcado, en el nuevo estadio de los ‘Spurs’.
Los ‘Skyblues’ dejaron atrás esa anomalía con un gol del neerlandés Nathan Aké en el minuto 88, el primero de la historia del Manchester City en el Tottenham Hotspur Stadium, escenario deportivo inaugurado en abril de 2019.
El gol vino acompañado de incertidumbre. Aké metió la pierna para rematar un balón que había rechazado difícilmente el arquero Guglielmo Vicario, molestado en su intervención por un jugador del City, el portugués Ruben Dias.
El árbitro validó el tanto después de una larga espera, mientras era rodeado por los jugadores del Tottenham, que protestaban ante lo ocurrido. La confirmación del tanto vino acompañada de una explosión de alegría en la zona donde estaban los aficionados visitantes, desplazados por millares a Londres para este partido.
Hasta esta victoria, el Manchester City había sufrido cinco derrotas en otros tantos partidos sin marcar ningún gol en ese estadio, que reemplazó al viejo White Hart Lane.
“Hoy jugamos realmente bien. Todos, desde el minuto uno al 95. Estamos intentando defender el título en este torneo y venir aquí era difícil”, manifestó a ITV el entrenador del Manchester City, Josep Guardiola.
En uno de los otros duelos de la cuarta ronda, el Bournemouth fue el primer equipo en clasificarse para los octavos de final de la Copa de Inglaterra (FA Cup) al no tener piedad y golear 5-0 en casa al Swansea, de segunda división de Inglaterra.
Con goles de Lloyd Kelly al minuto 7, Alex Scott (10′), el colombiano Luis Sinisterra (14′), el galés David Brooks (35′) y Dominic Solanke (44′), Bournemouth pasó a la siguiente ronda y espera por su rival en los octavos de final.