Países Bajos es una de las selecciones que está haciendo historia en esta Copa del Mundo Femenina Sub-20 que se realiza en Colombia, en el cual avanzaron hasta las semifinales tras dejar en el camino a las anfitrionas, la Selección Colombia.
Sin embargo, su camino solo pudo llegar hasta allí, pues cayeron en esa ronda contra Japón por 2-0 y no lograron avanzar a la gran final que se disputará el domingo en Bogotá.
El equipo neerlandés disputó casi todos sus compromisos en la ciudad de Cali, por lo que la acogieron como su casa y desde el primer momento se sintieron acompañadas por los caleños.
El miércoles, después de ser eliminadas contra las asiáticas, las jugadoras se acercaron a la tribuna suroriental del estadio sanfernandino para despedirse de sus fieles seguidores en este torneo, que fueron los niños y jóvenes del sector de Siloé.
Cabe recalcar que antes del inicio de la Copa, bajo un potente sol y con las expectativas a flor de piel, escuelas de formación infantiles de fútbol femenino en Siloé, compartieron un día único con la Selección de Países Bajos.
Con los populares ‘diablitos’ que adornan las calles de Cali en el mes de diciembre, fueron recibidas las jugadoras por esos días y que al llegar al parque La Horqueta, las jugadoras iniciaron esa visita escuchando dos actos musicales a cargo de la orquesta Sinfónica de Siloé y Tambores de Siloé, dos muestras rítmicas que reflejan el talento de los niños de esta zona de la ciudad. Con ritmos de música clásica y del Pacífico colombiano.
Dicha jornada transcurrió con mucha emoción y alegría, que quedaron en la mente y corazones de las jugadoras y jóvenes, por lo que antes de despedirse de Cali, las jugadoras quisieron tener ese último gesto con sus fieles seguidores, antes de su viaje a Bogotá por el partido del tercer puesto, en la tarde del domingo.