En un nuevo compromiso por la Liga Betplay entre Millonarios y Junior en el estadio El Campín de Bogotá, se presentó un hecho que llamó la atención de jugadores, asistentes y espectadores.
Sobre el minuto 38 del compromiso y tras un tiro de esquina, Leo Castro fue el encargado de mandar la pelota al fondo de la red tras un certero cabezazo, venciendo al guardametas del equipo tiburón.
Sin embargo, la polémica se desató cuando los futbolistas del Junior le reclamaban al árbitro una falta previa cometida hacia uno de sus jugadores; tras una larga discusión se dio el gol y el árbitro solicitó reanudar el compromiso.
Al momento de iniciar de nuevo el juego desde la mitad del campo, los jugadores del Atlético Junior le “regalaron” la pelota al Millonarios y decidieron quedarse quietos y no jugar.
Sin embargo, el conjunto embajador hizo caso omiso al momento insólito que estaban presenciando y decidieron seguir jugando para aumentar la ventaja.
Tras seguir con la jugada y al notar que gran porcentaje de los jugadores del equipo barranquillero se quedaron quietos, por poco llega la segunda anotación que fue evitada por la poca defensa del Atlético Junior, quienes si decidieron continuar jugando en el compromiso.
Cabe destacar que los jugadores del Junior le reclamaron durante 7 minutos al juez Duarte para que revisara en el VAR la falta previa al gol de Leo Castro. Esto, debido a que, incluso, el juez de línea en su momento, marcó falta, acción que no fue vista por el árbitro central.
Duarte le comentaba a los jugadores del Atlético Junior que ya no se podía hacer nada, ya que la falta se había originado en una jugada previa y el balón se había ido al tiro de esquina y este cobro ya se había ejecutado.
Finalmente, los jugadores decidieron continuar con el partido, sin dejar a un lado el descontento por la decisión tomada por el juez central del compromiso.