El panorama tributario en Colombia está a punto de experimentar una significativa transformación que podría tener un impacto directo en el bolsillo de los ciudadanos. El impuesto del 4x1000, presente desde 1998 y que ha generado controversia durante años, será objeto de una importante modificación debido a la aprobación de una reforma tributaria propuesta por el gobierno del presidente Gustavo Petro.
El impuesto del 4x1000 ha sido una fuente de ingresos para el gobierno colombiano durante décadas, ahora, esta modificación tiene como objetivo aliviar la carga financiera de los ciudadanos y promover un mayor acceso a sus ingresos.
Cabe recordar que bajo este sistema, las entidades bancarias cobran una suma de dinero cada vez que un usuario realiza un retiro en un cajero automático o una transacción bancaria. Aunque inicialmente se presentó como una medida temporal para recaudar fondos para enfrentar una crisis financiera, el impuesto se mantuvo vigente a lo largo del tiempo, generando críticas de diversos sectores.
Ante esto, el gobierno de Gustavo Petro ha decidido abordar el tema y buscar una solución que beneficie a los ciudadanos. La reforma tributaria propuesta contempla eximir a los colombianos del pago del 4x1000 en todas sus cuentas bancarias. Esto significa que los ingresos de las personas no se verán afectados por este gravamen, lo que representa una noticia positiva para miles de personas en el país.
El Ministerio de Hacienda y la Dirección de Impuestos y Aduanas Nacionales (DIAN) han sido los encargados de establecer las pautas para esta modificación. Según lo anunciado por el director de la DIAN, Luis Carlos Reyes, las personas podrán utilizar lo que ya tienen exento de 4x1000, pero con una importante novedad.
“Las personas podrán usar lo que ya tienen exentos de 4×1.000, pero no en una sola cuenta, sino que podrá ser la combinación del saldo que tiene en todas”, dijo el director de la Dian.
Esta exención, por lo tanto, no estará limitada a una sola cuenta bancaria, sino que podrá ser aplicada a la combinación del saldo que se tenga en todas ellas. De esta manera, se busca brindar una mayor flexibilidad a los ciudadanos para administrar sus finanzas de manera más eficiente y ahorrativa.
La buena noticia no se limita a las cuentas bancarias tradicionales. Las billeteras digitales, que han ganado popularidad en los últimos años debido a su facilidad de uso y conveniencia, también se verán beneficiadas por esta modificación. Servicios como Nequi y Daviplata estarán contemplados dentro de este nuevo sistema tributario, lo que permitirá a los usuarios realizar transacciones sin preocuparse por el gravamen del 4x1000.
Si bien esta reforma tributaria representa un importante avance para los ciudadanos colombianos, es importante tener en cuenta que no será aplicada de inmediato.
Según lo establecido, el cambio en el impuesto del 4x1000 comenzará a regir dos años después de que se apruebe la reforma, lo que significa que los colombianos podrán disfrutar de este beneficio a partir del segundo semestre de 2024.
Esta medida busca brindar un período de transición para que las entidades bancarias y los ciudadanos puedan adaptarse adecuadamente a los cambios.
El anuncio de esta reforma tributaria ha sido recibido con optimismo por parte de los ciudadanos y diversos sectores económicos. Se espera que esta medida tenga un impacto positivo en la economía familiar de la población, incentivando el ahorro y la inversión. Además, se prevé que esta modificación promueva un mayor uso de servicios financieros digitales, lo que podría impulsar la inclusión financiera en el país.
Finalmente, la importante modificación al impuesto del 4x1000 en Colombia representa una buena noticia para los ciudadanos, quienes podrán disfrutar de un alivio en sus finanzas gracias a la exención de este gravamen en sus cuentas bancarias.
La inclusión de billeteras digitales en este beneficio amplía las posibilidades de acceso a servicios financieros modernos y fomenta una mayor cultura de ahorro. Aunque la implementación tomará un par de años, esta medida marca un paso significativo hacia un sistema tributario más equitativo en el país.