Con el propósito de preservar la salud mental de los trabajadores y brindar más espacios de esparcimiento personal, a partir del 15 de julio de 2023, todas las empresa en Colombia deberán reducir gradualmente la jornada laboral de sus empleados.
Así lo estableció la Ley 2101 en el artículo 161 del Código Sustantivo del Trabajo (CST), el cual ordenó la reducción progresiva de la jornada de trabajo semanal de 48 a 42 horas en un plazo de tres años.
Además, la normativa señala que dichas horas serán distribuidas en un acuerdo entre el empleador y el trabajador en cinco o seis días de trabajo, garantizando siempre un día de descanso.
Meses atrás, la ministra de Trabajo, Gloria Inés Ramírez, indicó que la reforma se rige bajo los siguientes principios: la igualdad de oportunidades para los trabajadores, la remuneración mínima y vital, la estabilidad del empleo, y el principio de favorabilidad y la progresividad.
En ese sentido, la reducción de la jornada semanal se realizará de manera gradual, sin disminuir el salario ni afectar los derechos o las garantías adquiridas por los trabajadores.
Cabe destacar que, en caso de que el empleador desee implementar la reducción de seis horas semanales en 2023, puede hacerlo sin ningún inconveniente legal.
Sin embargo, las empresas que prefieran adaptarse a lo indicado por la ley deberán hacer la reducción de mínimo una hora a partir del 15 de julio de 2023, es decir, que a partir de esa fecha, los empleados en Colombia pasarán de trabajar 48 a 47 horas a la semana.
Bajo esa misma línea, para el 15 de julio de 2024 la jornada ordinaria pasaría a ser de 46 horas semanales.
Es importante que los trabajadores tengan en cuenta que la reducción depende de las decisiones que tome internamente cada empresa, por lo que a partir del próximo mes podrá trabajar una o dos horas menos.
Por otro lado, el Departamento Administrativo de la Función Pública precisó que dicha ley fue concebida para promover la productividad empresarial en el sector privado. Por ello, dentro de su ámbito de aplicación no se incluyeron a los servidores públicos (empleados públicos y trabajadores oficiales).
¿Qué implicaciones tendría en la economía del país?
Desde la socialización de la nueva ley, las reacciones del sector privado no se hicieron esperar. De hecho, según lo expresado por ese colectivo, la aplicación de la norma generaría un impacto negativo en las finanzas de las empresas, sobre todo si todavía se están recuperando económicamente de las pérdidas sufridas en pandemia.
Además, el empresariado resalta que lo planteado desde el Ministerio del Trabajo encarecería el costo por cada empleador, teniendo en cuenta que cada hora menos se convierta en hora extra, por lo que las empresas que deseen que sus colaboradores continúen trabajando ocho horas, tendrán que asumir ese costo adicional en sus nóminas.
El presidente de la Federación Nacional de Comerciantes (Fenalco), Jaime Alberto Cabal, sostuvo en diálogo con El Tiempo que el costo de vida tendrá un incremento del 2 % anuales. Adicionalmente, destacó que el impacto de este año es mucho mayor producto del incremento del 16 % del salario mínimo, quedando en 1.160.000 pesos.
“En 2023, además del crecimiento del 16 % del salario mínimo, tendríamos un 2 % adicional de aumento en los costos laborales por concepto de reducción de la jornada. Esto sin contar la anunciada reforma laboral que cambiaría las jornadas diurnas y nocturnas, dominicales y festivos y tendría un impacto adicional de 12 %. Con ello, los empresarios se pueden ver afectados en cerca de un 30 a 35 % de los costos laborales este año”, dijo Cabal para el medio mencionado anteriormente.