El año pasado, el comercio electrónico en Colombia creció un 20 % respecto al 2017, representando el 1,5 % del PIB nacional, según estimaciones de la Cámara de Colombiana de Comercio Electrónico (Ccce). De acuerdo con Statista, ese porcentaje equivaldría a casi $20 billones.
En ese auge del e-commerce en el país, Cali ha tenido una participación importante, siendo la segunda ciudad con más proporción de la población que participa en el comercio en internet, solamente por debajo de Bogotá, según la misma Ccce.
En la ciudad, el 37 % de la población que usa internet accede al comercio electrónico, ya sea solo para consultar y comparar precios de productos de su interés, o para hacer efectivas sus compras. Esa proporción, según la Ccce, es mayor a la del promedio nacional (32%), y a la de ciudades como Medellín (33%) y Barranquilla (27%).
“El crecimiento que vemos en comercio electrónico se ha dado en parte por la masificación de las plataformas de pago en el sector financiero, a las que ahora se tiene más acceso”, explica el profesor Santiago Roldán, de la Facultad de Ciencias Administrativas de la Universidad Autónoma de Occidente.
En ese sentido, de acuerdo con datos de la Ccce, las plataformas de pago que operan en el territorio nacional ya son 97 (al cierre de 2018), un crecimiento de 53,9 % frente al año pasado cuando había 67. Este aumento se debe a que las ventas en línea se han convertido en el canal adicional ideal para cualquier tipo de negocio.
Según el docente, cada vez más empresas ven en internet un camino necesario para mejorar sus ventas. “Es evidente que las empresas están teniendo la necesidad de ampliar sus canales de venta para expandir el mercado, pues una estrategia de comercio electrónico no solo es para atender el mercado local, sino que da la posibilidad de acceder al mercado nacional e internacional”, dice Roldán.
En Cali, según la Ccce, el 17,27% de las compras en internet que se pagan contra-entrega están destinadas a los alimentos, con el uso de aplicaciones de domicilios como Rappi, Uber Eats o iFood. En esta última plataforma, los pedidos aumentaron en un 25 % en julio, respecto al mes anterior, según un informe presentado por la marca.
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“Hemos logrado expandir la cobertura en Cali, asegurando incluso la operación de iFood en zonas y barrios donde ninguna otra aplicación llega. Creo que esto apalancó en gran medida nuestro crecimiento, además de la ejecución de campañas especiales para la capital valluna”, explica Camilo Sarasti, country manager de iFood Colombia.
Según esta plataforma, el promedio de gasto de los caleños por pedido es de $17.128, y en un 92 % de los casos se paga en efectivo contra-entrega. En cuanto a las categorías, la comida rápida lidera las órdenes con un 39%, seguida por las hamburguesas (17%), pizza (9%), típica (6%), pollo (6%) y parrilla (4%).
Otro buen porcentaje de la oferta en el comercio electrónico se las lleva el mercado automotriz, especialmente el de motocicletas.
Según datos revelados por Mercado Libre y su portal Tucarro.com, en el que se registran más de 8.500 publicaciones de motos, el primer semestre del año tuvo un aumento del 13 % en las ventas de motocicletas a nivel nacional.
Cali y el Valle participan con el 9 % de esta categoría. Las motos más buscadas en el departamento son, en orden, la Bajaj Pulsar NS 200, la Kymco Agility 124, la Yamaha BWS AT 124 y la KTM Duke 200.
“El crecimiento del comercio electrónico ha ayudado a que la industria automotriz tenga un repunte significativo en la categoría de las motocicletas. El 60% de motos que se publican en la plataforma de Mercado Libre se venden en menos de 4 semanas”, comenta Philippe Fossaert, gerente de Mercado Libre y Tucarro.com. “El perfil del vallecaucano que oferta y compra por la plataforma, el 64% son hombres y un 36% mujeres, y el rango de edad predominante es entre los 25 y 34 años”, añade.
Los retos
Colombia es el cuarto país con mayor participación en el comercio electrónico en Latinoamérica, una región que movió US$ 54.000 millones de dólares en el 2018, según el más reciente informe de BlackSip.
“En términos de cantidad de ventas, Colombia ocupa el cuarto puesto, después de Brasil, México y Argentina. Pero nuestro ritmo de crecimiento ha sido más acelerado que el de ellos en los últimos años, y esperamos ser los terceros en ventas en el 2021”, explica Maria Paula Silva, country manager de BlackSip, que calcula el crecimiento del país en ecommerce en 60 % para este año.
Sin embargo, pese a las buenas cifras de los últimos años, hay retos importantes en materia de acceso a medios digitales de pago en Colombia.
“Las facilidades de pago es una de las mayores preocupaciones que tiene el desarrollo del e-commerce, porque todavía el miedo de poner su tarjeta de crédito, y la falta de bancarización son los mayores limitantes en Colombia”, dice Silva.
En esta materia, un estudio de la Ccce mostró que solo el 21 % de los compradores en línea usan tarjeta de crédito; mientras que la mayor proporción, un 45 % continúa prefiriendo el pago offline en efectivo contra entrega o a través de redes como Efecty o Baloto.
“El potencial de crecimiento para el país es enorme, pero para lograr esta expansión requiere una profundización en el acceso de los colombianos a medios de pago digitales, así como mayor conectividad a internet”, dice al respecto María Fernanda Quiñones, presidente ejecutiva Ccce.
Tal como señala la ejecutiva, el país se sigue ‘rajando’ en materia de acceso a internet, comparado con pares de la región. Según el reporte de BlackSip, la penetración del servicio en Colombia (68,2 %) es la más limitada en Suramérica, superando solo a Venezuela (59,6%).