Luego de conocerse la suspensión de los subsidios de vivienda del programa Mi Casa Ya, el presidente de la Cámara Colombiana de la Construcción, Camacol, Guillermo Herrera Castaño, manifestó su preocupación máxime si se tiene en cuenta que este ha sido uno de los programas más exitosos en términos de acceso a vivienda de interés social, VIS.
“Las medidas adoptadas le dan un fuerte golpe al programa, y nuevamente generan incertidumbre tanto para los hogares beneficiarios como para el sector constructor, poniendo en riesgo logros sociales y económicos alcanzados en los últimos años”, señaló Herrera, a través de un comunicado a la opinión pública.
En la misiva, el dirigente gramial aseguró que con esta decisión “más de 40.000 familias de bajos ingresos se verán afectados en su propósito de ser propietarios, a pesar de las promesas del Gobierno”.
Según lo manifestado por el Presidente de Camacol, en 2024 serán 20.000 hogares afectados y el año siguiente serán 25.000, en su mayoría de estrato dos y tres.
“Las familias van a terminar pagando los mayores costos de una decisión que debió haber sido programada presupuestalmente a inicio de año”, dijo Guillermo Herrera.
Implicaciones de la medida según Camacol
Suspensión de nuevas postulaciones y preasignaciones: desde la emisión de la circular, no se permitirán nuevas postulaciones ni preasignaciones para el subsidio que otorga el programa. Esto afecta a los hogares interesados en adquirir una vivienda de interés prioritario (VIP) o una VIS, limitando el acceso a los beneficios establecidos.
Agotamiento de las coberturas a la tasa de interés: los cupos para el beneficio de reducción en la tasa de interés están agotados. Sin esta cobertura, los hogares beneficiarios ven afectada su capacidad de pago por cuenta del incremento en las cuotas de crédito hipotecario que pueden ser cercanas al 30 %.
Hogares afectados: cerca de 40.500 hogares que esperaban desembolsos para 2024 y 2025 se verán afectados por la decisión.
En cuanto al impacto de esta determinación, Herrera manifestó que la falta de un régimen de transición afecta las expectativas legítimas de las familias que ya cuentan con subsidios asignados o que han avanzado en el proceso de adquisición de vivienda”.
Explicó que esto podría derivar en mayores desistimientos y elevaría sustancialmente los pagos de las cuotas mensuales que tendrían que asumir hogares de bajos ingresos.
De acuerdo con el Presidente de Camacol, “no es una decisión que se haya tomado ahora; es algo de lo que se alertó desde que inició este Gobierno. Hoy, lo que sucede con Mi Casa Ya, es producto de problemas que aumentaron durante el 2024 en la gestión de los recursos para las coberturas”.
Asimismo, recalcó que los recursos que se requieren para otorgar las coberturas a los hogares afectados suman $128.776 millones en 2024 y 2025, un monto que representa el 0,025 % del Presupuesto General de la Nación del próximo año.
“La noticia es desafortunada, más aun teniendo en cuenta que el Ministerio de Vivienda anunció en febrero de este año que tenía aseguradas las 50 mil coberturas a la tasa de 2024″, explicó.
La solicitud de Camacol
Implementación de un régimen de transición: es imperativo que Fonvivienda gestione los recursos necesarios para garantizar la continuidad de los subsidios y coberturas de los hogares que ya tienen compromisos adquiridos.
Revisión de las decisiones adoptadas: urge que el Gobierno Nacional a evalúe el impacto económico y social de estas medidas, buscando alternativas que mantengan la estabilidad del programa y eviten una desaceleración en el mercado de vivienda VIS.