El costo de vida en Colombia y en Cali sigue en descenso. Según las recientes cifras publicadas por el Dane, en abril de 2024 la inflación en el país varió 0,59% y en la capital del Valle 0,63%. En ambos casos este aumento fue menor al registrado en igual mes del 2023 (0,78% y 0,72%, respectivamente).

Sin embargo, surge un riesgo a tener en cuenta y es que el costo de los alimentos volvió a repuntar. En Cali, este grupo de gasto varió 1,56%, siendo lo que más impulsó los precios en el cuarto mes del año. Incluso, ese crecimiento fue superior al promedio nacional de 1,16%.

Resultados de la inflación en Cali al mes de abril del 2024 | Foto: El País

Julio César Alonso, director del Centro de Investigaciones en Economía y Finanzas, Cienfi, de la Universidad Icesi, comentó que la inflación de alimentos en Cali solo fue superada por Villavicencio. “Esta fue la variación más alta de las 12 divisiones que mide el Dane. Este era un resultado que se esperaba por el fenómeno de ‘El Niño, que típicamente aumenta los costos de producción de los alimentos”.

Agregó que pese a este aumento en los alimentos, la tendencia de reducción de los precios en general continua en la ciudad. “Esto es una buena noticia, pues es altamente probable que este año se termine con una inflación sustancialmente menor que la del 2023″.

Sin embargo, los temores crecen porque la tendencia al alza en el valor de los alimentos se ha mantenido en los primeros días de mayo en el Valle del Cauca.

De acuerdo con el más reciente reporte de Cavasa (Central de Abastecimiento del Valle), productos clave de la canasta familiar tuvieron alzas esta semana, las cuales oscilan entre un 9 % y un 73 %, entre ellos están la arveja verde, cebolla cabezona blanca, la papa en todas las variedades, frutas como el lulo, maracuya, piña, sandía y el tomate de árbol.

“Al igual que la semana anterior, tenemos que el factor climático (exceso de lluvias en algunas de nuestras zonas de producción, afectaron el normal desarrollo de las labores agrícolas) como también reportamos nuevamente desplazamiento de parte de nuestra oferta a otros departamentos”, dijo Óliver Medina, jefe de precios de Cavasa.

Se teme que el clima pueda afectar la oferta futura de alimentos que lleguen a la región, sin embargo en el mercado de esta semana en los grupos de los cárnicos, granos, procesados, lácteos, huevo, plátano, verduras, hortalizas, se tuvo una oferta satisfatoria.

Inflación por ciudades en Colombia, en abril de 2024 | Foto: Presentación Dane

Posibles efectos

Laura Katherine Peña, economista del Bbva Research, dijo que “esperamos que el IPC de alimentos continúe ascendiendo durante el segundo trimestre del año, llevando a que la inflación total tenga un ritmo lento de descensos en este periodo. A pesar de esto, la inflación sin alimentos seguirá descendiendo, permitiendo que el indicador total cierre el 2024 cerca del 5,4%”.

Asimismo, según la Asociación Nacional de Instituciones Financieras, Anif, lo que se puede esperar es que durante los próximos meses persistan algunos factores que podrían incidir en la tendencia presentada hasta el momento.

“En primer lugar, los efectos del fenómeno de ‘El Niño’ comienzan a ser evidentes en el precio de los alimentos y la energía por lo que será importante seguir monitoreando el comportamiento de este rubro”, dijeron en su análisis.

Por su parte, Jackeline Piraján, economista Scotiabank Colpatria, explica que si bien la inflación bajó, realmente lo está haciendo a un nivel un poco más lento de lo que se había observado durante el primer trimestre del año, “es probable que esos progresos lentos continúen por el resto del año 2024″.

Agregó que para final de año se espera un nivel del 5.5%, que indica que de aquí al final de año cada progreso mensual va a ser mucho más lento de lo que se experimentó en el primer trimestre. “Lo anterior se atribuye a que es durante el primer trimestre donde se tiene la mayoría de ajuste en los precios, eso no ocurre durante el resto del año y por eso se tendrán progresos menos marcados de aquí en adelante”.

La analista también destacó que en la parte de los alojamientos, se nota que el arriendo sigue siendo una fuerte presión para el bolsillo de los colombianos, tal vez atribuido al hecho de que está indexando a la inflación del 2023.