Uno de los mercados más atractivos para muchos colombianos es el inmobiliario. Los perfiles de inversión más conservadores prefieren invertir su dinero en una casa, apartamento, local comercial o lote, debido a que puede estar más seguro.
Aunque el sector no ha tenido un buen comportamiento desde que inició el 2023, lo cierto es que desde hace algunos meses ha mostrado una recuperación notoria. Si su idea es comprar vivienda a crédito, es importante tener en cuenta varios factores antes de solicitar el préstamo. Por ello, le contamos cuáles son las mejores alternativas y modalidades a la hora de hacerlo y así evite un dolor de cabeza a la hora de pagar.
Crédito UVR o en pesos: cuál es mejor
En Colombia existen dos alternativas de créditos de vivienda. El primero es el que se maneja y se cobra en pesos colombianos. Este generalmente maneja una cuota fija. El segundo se maneja y se cobra en UVR (Unidad de Valor Real), que se determina conforme a la variación del Índice de Precios al Consumidor (IPC).
La decisión sobre cada uno depende de diferentes variables y condiciones financieras que más le convengan.
Crédito en pesos
El sistema de pesos cuenta con dos opciones. El primero es el abono a capital, en el que las cuotas aumentan a medida que avanza el tiempo y en la que se comienza con la cuota más alta
La otra es la tasa fija, en la que se establece una cuota con mensualidades constantes durante los 180 meses para el caso del ejemplo. Es decir, puede iniciar pagando una cuota de 3 millones y acabar con una cuota de 1,2 millones.
El abono a capital se hace más conveniente, según Metro Cuadrado, cuando puede mantener con sus ingresos las primeras cuotas elevadas.
Crédito en UVR
Respecto al crédito en UVR, este tiene tres modalidades para definir las cuotas. La baja, estable y cíclica. En la cuota baja, se comienza con un pago mínimo que se va aumentando cada mes. Este se recomienda si la expectativa de la inflación va al alza.
La segunda modalidad de cuota estable establece que los pagos serán más altos que la primera modalidad. Sin embargo, estos empezarán a bajar en la medida que la inflación no aumente.
Respecto a las características de amortización, las cuota es la más baja de todos los sistemas de amortización, al inicio del crédito.
¿Qué tantos colombianos están colgados pagando cuota de vivienda?
La alerta en el mercado de vivienda no está encendida solo por la caída en las ventas, sino por la mora que se empieza a evidenciar en el pago de los cuotas mensuales de los créditos hipotecarios.
Camacol ha reportado una baja en la comercialización de unidades de vivienda nueva superior al 60% en lo corrido del 2023. Ahora, el Dane informó que para el primer semestre del año se desembolsaron $4,1 billones para la compra de vivienda a precios constantes -descontando la inflación-, lo que representó una reducción de 36,4% frente a igual periodo del 2022.
Pero, adicionalmente, está aumentando el monto de la cartera que se está quedando colgada, es decir, que los hogares se están demorando en pagar.
Según los datos del Dane, en el segundo trimestre de 2023, las entidades que financian vivienda en el país cerraron con un capital de $1,5 billones en mora de una o más cuotas, lo que representó una variación anual de 9,9%.
Agregó el informe de la entidad, que el saldo de capital en mora entre una o dos cuotas creció 12% anual; entre tres y cuatro cuotas, 24,9% y entre cinco y seis cuotas, 25%.
El consultor Memphis Viveros considera que se está entrando en un nivel preocupante, pero que la situación podría empeorar en los próximos 8 meses sino cambia el panorama económico del país.