Empieza el 2020 y muchos piensan en qué invertir. Los bienes raíces se constituyen en una de las opciones de inversión más seguras, al generar a largo plazo rentas fijas adicionales.
Existen dos objetivos para invertir en bienes raíces: comprar para rentar o para vender.
¿Cuál es la más rentable?
Dado que en Colombia alrededor del 46% de los hogares vive en arriendo, esta opción debería ser una excelente inversión; no obstante, en la actualidad está generando rendimientos muy bajos frente al valor comercial porque existe un exceso de oferta para arrendar y, además, los impuestos prediales aumentaron en los últimos años.
En números, mientras en países desarrollados el arriendo de una propiedad está alrededor del 1% del valor de venta; en Colombia estaría en un rango entre 0,4 % y 0,7% dependiendo del estrato.
Por ejemplo, un apartamento usado que tiene un precio de venta de $100 millones, el alquiler sería de 1 millón en un país desarrollado y entre $500.000 y $700.000 en Colombia.
La buena noticia es que independiente del país donde realice la inversión, tenga claro que comprar para alquilar siempre será lucrativo en la medida que usted logre tener la inteligencia financiera adecuada para adquirir propiedades en lugares donde se pueda alquilar a una cantidad justa, minimizando el tiempo y el dinero de la gestión para arrendarla.
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Por ejemplo, comprar para alquilar en estratos bajos ofrece la ventaja de poder conseguir bienes raíces a precios asequibles para rentar en poco tiempo, a un porcentaje incluso superior al 0,7% del valor del inmueble.
Otros casos, como realizar algunas mejoras locativas en las zonas de esparcimiento de la propiedad, explorar negocios como rentar por días en plataformas dedicadas a la oferta de alojamientos, o adecuar habitaciones para la renta estudiantil, también le permitirán al propietario solicitar alquileres superiores a las del mercado.
Así sí sería una buena inversión. La segunda opción es comprar para vender, que ha sido la alternativa más rápida para acumular capital y adquirir mayor cantidad de bienes raíces.
El negocio consiste es comprar barato, remodelar y vender caro. Comprar barato significa encontrar propiedades (en condiciones adecuadas) con un precio entre 10% y 20% por debajo del mercado; mientras que vender caro radica en vender una propiedad en buenas condiciones, a precios de mercado, sin descuentos ni intermediarios.
La clave será entender cómo encontrar buenas propiedades y luego cómo reconocer una buena oportunidad de negocio.
Recuerde, la mayoría de compradores, en especial de ingresos bajos, buscan una vivienda lista para vivir, no una casa para reparar, aunque se trate de reparaciones estéticas.
Esa necesidad crea una oportunidad especial para este tipo de inversión. Por ende, cuanto más “deslucida” sea la propiedad, generalmente mayor será el beneficio del negocio.
(*) cofundador de la empresa dineroemocional. com