Por tercer año consecutivo la Fundación Valle del Lili se ubica como el mejor hospital de Colombia y No. 162 a nivel mundial, según el ranking Newsweek.
Además de su compromiso con la excelencia médica, la investigación y la educación como hospital universitario, es un referente internacional por sus programas de gestión ambiental y responsabilidad social.
Su directora general, Marcela Granados, nos habla del liderazgo de la institución, su apuesta por la responsabilidad social y las iniciativas en sostenibilidad.
¿Cuáles son los principales logros de FVL?
La Fundación Valle del Lili ha tenido un importante proceso de fortalecimiento institucional. Actualmente contamos con cinco sedes y un equipo de más de 8.000 colaboradores al servicio de la comunidad. Nuestro modelo de atención nos permite ofrecer excelencia en servicios de salud de manera humana y con un enfoque diferencial.
Todo esto se ve reflejado en los diferentes reconocimientos nacionales e internacionales que hemos recibido, y entre los que se destacan: la acreditación en salud con excelencia por Icontec, el reconocimiento como hospital No. 1 de Colombia y 162 en el mundo de Newsweek, y el primer lugar entre las instituciones de salud con actividades académicas y de investigación en Colombia, según el ranking Scimago. Todo esto nos reta a seguir trabajando de manera decidida por entregar una excelente experiencia de salud a nuestros pacientes y sus familias.
¿Cuál ha sido la apuesta de FVL en materia de responsabilidad social?
Nuestros cuatro pilares (Salud, Educación, Investigación y Solidaridad) están enfocados hacia la Responsabilidad Social. A través de nuestros programas sociales contribuimos a mejorar no solo la salud sino las condiciones de vida de los pacientes, sus familias y la comunidad.
Permítame compartir dos ejemplos: El “Hospital Padrino” es nuestra apuesta para acercarnos a centros de salud en zonas apartadas del país, con el objetivo de mejorar las capacidades del talento humano en salud y soportar las decisiones clínicas a través de herramientas tecnológicas.
Uno de nuestros proyectos, el cual iniciamos en el año 2018, está relacionado con la atención de maternas, y los resultados son muy satisfactorios pues hemos podido reducir los índices de mortalidad materna en las regiones donde se encuentran esos hospitales apadrinados.
Otro proyecto denominado “Alimentando Esperanzas” está dirigido a pacientes pediátricos en condición de vulnerabilidad donde les garantizamos la seguridad alimentaria posterior al egreso hospitalario.
Estas son solo algunas iniciativas que dan cuenta del impacto e importante huella social que dejamos en las comunidades.
¿A propósito de la COP-16 qué iniciativas lidera FVL en materia de Gestión Ambiental?
Desde 2017 formamos parte de la Red mundial de Hospitales Verdes y Saludables impulsada por ‘Salud Sin Daño’. Esta alianza nos ha permitido trazar estrategias innovadoras para mitigar nuestro impacto ambiental y promover un futuro más saludable en cada uno de nuestros procesos.
Hoy podemos decir que somos un hospital libre de químicos peligrosos con procesos que nos permiten ser referentes para otras instituciones de salud de Colombia y el mundo.
Seguiremos trabajando para fortalecer la salud de nuestra población, mitigar el impacto ambiental, impulsando la educación, apostándole a la investigación e innovación y apoyando a las comunidades más vulnerables.