Pese a todos los esfuerzos del sector privado, las ventas externas de cannabis de uso medicinal han tenido trabas y se han visto considerablemente afectadas.
Según Diego Ruiz, director de Asuntos Regulatorios de FCM Global, compañía que produce aceites, extractos y aislados de cannabis y que exporta a Perú, Ecuador, Brasil, Argentina, Alemania, Bélgica, Reino Unido y Uruguay, “el Gobierno está concentrando esfuerzos en realizar exportaciones de flor seca y de semillas, pero se están dejando rezagados otros como los fitoterapéuticos”.
El empresario agregó que “los retrasos en los registros con el Invima, así como la demora del Fondo Nacional de Estupefacientes, quienes pueden tardar entre 2 y 3 meses para aprobar una certificación de exportaciones para los productos fitoterapéuticos, son situaciones que han generado pérdidas considerables para el sector”.
Para Javier Díaz Molina, presidente ejecutivo de Analdex, “factores como la posición geográfica, variedad de los pisos térmicos, ubicación tropical, bajos costos en los cultivos y óptimas condiciones de crecimiento, permiten que el cannabis de uso medicinal colombiano sea muy llamativo en el mundo. Sin embargo, debe haber una mayor celeridad y disposición del Gobierno para que el cannabis medicinal sea un actor relevante en esa búsqueda de diversificación de la canasta exportadora del país”.
El incremento en las exportaciones del sector en los últimos años demuestra un aumento de más de 3.000% de las ventas externas entre 2019 y 2022. El año pasado, el país presentó una variación positiva de 89,1% frente a 2021, alcanzando exportaciones totales de 9,6 millones, de acuerdo con cifras del Dane y ProColombia. No obstante, está lejos de las proyecciones que tenían las compañías exportadoras.
Entre los países que más demanda tuvieron de cannabis de uso medicinal colombiano en 2022 se encuentran Argentina con US$3,8 millones, Brasil (US$1,3 millones), Australia (US$1,3 millones), Alemania (US$649.640), Suiza (US$595.549) y Estados Unidos (US$552754).
En 2021, el Ministerio de Salud, junto al de Justicia y de Agricultura, generaron la hoja de ruta del cannabis regulado con el Decreto 811 de 2021 y la Resolución 227 de 2022, buscando remarcar su uso industrial, uso en alimentos y bebidas, el régimen de exportación, así como habilitar las ventas externas de la flor para uso medicinal.
Por otro lado, para Rodrigo Patiño, gerente regional de Antioquia de Analdex, quien ha liderado el Comité de cannabis de uso medicinal de Analdex, se hace prioritario seguir consolidando las mesas de facilitación del sector, donde se trabaja en la identificación de cuellos de botella con las diferentes entidades regulatorias que actúan en la industria, desde su regulación hasta sus procesos logísticos, buscando así generar facilitación y estandarización en los envíos al exterior en cualquier modalidad de exportación.
Patiño puntualizó que “hay que seguir trabajando en los mecanismos de bancarización, ya que se carece de una adecuada oferta de inclusión al sistema financiero, debido a múltiples factores de estas industrias denominadas sensibles en términos de riesgo. Para este sector tener una cuenta bancaria que permita el reintegro de divisas es toda una odisea y se tienen que hacer grandes esfuerzos e inversiones en materia de cumplimiento para no perderla. Nada se gana si se vende al exterior y no tenemos como traer las divisas”.