El 2024 no fue un buen año para el sector de la vivienda, que, de hecho, ha sido uno de los más golpeados por la crisis económica que vive el país.

En el más reciente informe entregado por Camacol, Guillermo Herrera, presidente del gremio, sostuvo que septiembre había sido el peor mes para la venta de vivienda. Señaló que entre enero y septiembre del año pasado (2023) se vendieron 107.000 viviendas en Colombia y este año llevan 106.000.

Venta de vivienda en Colombia, cifras consolidado entre enero y septiembre de 2024. Fuente: Coordenada Urbana Camacol Gráfico: El País | Foto: El País

“Estamos 1.000 por debajo, o en el mejor de los casos estamos igual que el año pasado, y ya sabemos que en 2023 la descolgada fue grande frente a la nivel de ventas que teníamos en 2022″, afirmó.

Así las cosas, y basada en las desalentadoras cifras, la Asociación Bancaria y de Entidades Financieras de Colombia, Asobancaria presentó una serie de propuestas para reactivar este sector.

A través de un comunicado, el presidente del ente gremial, Jonathan Malagón, señaló varias ideas, por ejemplo, que se revise el parámetro regulatorio LTI, que determina el porcentaje de ingreso que los hogares pueden destinar para la compra de viviendas No VIS, aumentando su límite del 30% al 40 %. Con estos más familias podrías calificar.

Evolución de venta de vivienda en Cali entre enero y septiembre de 2024. Fuente: Camacol Valle Gráfico: El País | Foto: El País

Asimismo, se planteó que el Gobierno mantenga la cifra de subsidios del programa Mi Casa Ya y garantice los recursos asociados a este. Lo que se traduce en conservar 50.000 subsidios y los recursos para ello.

“Una tercer idea que planteamos es que se reactive el subsidio a la tasa de interés para viviendas de precio medio, conocido como Frech No VIS y reinstaurar un subsidio para la compra de vivienda No VIS que cumpla con criterios de sostenibilidad”, afirmó Malagón.

Al respecto, Alexandra Cañas, gerente de Camacol Valle, dijo estar de acuerdo con reactivar el sector a través de subsidios. “Esto es lo que permite el cierre financiero de los hogares y que más familias puedan acceder a los créditos hipotecarios. Subsidios tanto nacionales, departamentales y municipales, estos últimos se convierten en estratégicos para promocionar la reactivación desde las mismas regiones”, afirmó.

Agregó que “existen otras estrategias que no son inmediatas sino de mediano plazo, como como políticas tributarias y urbanísticas para la promoción de la vivienda , la Optimización de trámites y agilizar todos los procesos asociados a la gestión de suelo”.

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Sin embargo, para el arquitecto Diego Guzmán, gerente de Estudio APLG, Arquitectura para la Gente, las propuestas de Asobancaria carecen de peso y dejan todo en manos del Gobierno. “Los bancos tienen que replantear su desempeño, mejorar el acceso al crédito tanto para la gente como para las empresas constructoras. Los bancos no sacrifican nada, la tasa de interés sigue siendo alta y por eso la gente teme endeudarse”, dijo.

Agregó, que lo realmente se necesita para reactivar el sector es que la banca flexibilice más el crédito de vivienda y el crédito constructor.