A dos meses de que acabe el año ya empiezan a sonar algunos incrementos tanto a nivel salarial como de servicios, entre ellos, obviamente, se encuentra el alquiler de inmuebles y viviendas.

Tenga en cuenta que el incremento se aplicará una vez cumpla el año de firmado el contrato. | Foto: Getty Images

Cabe anotar que un gran número de personas viven bajo esta modalidad en el país. Las cifras son claras: según el Dane, cerca de 40,3 % de colombianos que opta por ser arrendatario ante las dificultades para acceder a un techo propio o por elección personal.

Sin embargo, el aumento sobre los arriendos cada año está regulado por la Ley de Arrendamientos Urbanos.

Según algunos analistas, la inflación podría estar dentro del rango del 5% al 6%. | Foto: Guillermo Torres / SEMANA

En ese orden de ideas, el aumento se hace teniendo en cuenta el IPC o la inflación al cierre del año, es decir, que el ajuste sobre los arriendos no puede superar este valor.

Aunque aún no hay una cifra oficial, algunos analistas económicos vienen haciendo sus cálculos para determinar cuál sería el impacto sobre los consumidores.

En ese sentido, las proyecciones apuntan a que la inflación podría cerrar el año sobre el 5 %. Tampoco se descarta que podría estar dentro del rango del 5 % - 6 %, esto es una buena noticia para los arrendadores, pues significaría un aumento menor que el año pasado.

El incremento solo se conocerá en enero del 2025, cuando se publica oficialmente el dato del cierre de inflación para el 2024.

Ahora bien, los arrendadores deben conocer bien las cláusulas de su contrato de arrendamiento, pues no todos son objeto de incrementos en el pago de alquiler con la llegada de un nuevo año.

El arrendatario también podrá llegar a acuerdos con su arrendador sobre el incremento del canón de arrendamiento. | Foto: Getty Images

Lo anterior, porque muchas personas firmaron el contrato en diferentes meses y si aún no han cumplido el año, el arrendador deberá esperar para hacer el aumento. Recuerde también que todo debe quedar por escrito para no tener problemas legales ante eventuales diferencias que se presenten con el arrendatario.