La industria manufacturera en Cali y en Colombia volvió a generar empleo. En la capital del Valle esta tendencia se vio desde noviembre pasado y en el país desde hace un poco más de tiempo.
Se crearon 8000 empleos nuevos en este sector para el trimestre noviembre del 2018 y enero del 2019 en la ciudad y 66.000 en el territorio nacional.
Las cifras son consecuentes con el mejoramiento en la producción y en las ventas de la industria durante la vigencia anterior y con los resultados que el Dane presentó esta semana sobre la evolución del Producto Interno Bruto (PIB).
Es así como la manufactura creció el año pasado 2,0 % en el PIB, pero un año atrás había decrecido 1,8 %. Todo parece indicar que el 2018 fue el inicio de la recuperación del sector productivo.
Bruce Mac Master, presidente de la Asociación Nacional de Empresarios (Andi), considera estos resultados como positivos, pero dice que están aún por debajo del promedio de crecimiento de la economía. Por esta razón afirmó que “tenemos que seguir diversificando y generando mecanismos de inversión que nos permitan tener una plataforma industrial cada vez más robusta”.
Al respecto el ministro de Comercio, Industria y Turismo, José Manuel Restrepo, dijo que el repunte de la industria confirma que la confianza en el sector productivo del país ha avanzado en su consolidación y “así quedó evidenciado luego de tres trimestres consecutivos de recuperación”.
En el Valle del Cauca la recuperación de la industria también ha sido evidente. Las cifras de la encuesta de la Andi indican que la producción creció 1,8 % en 2018 y las ventas 4,5 %, luego de un 2017 en el que solo se registraron cifras negativas.
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¿Qué se espera este año?
La ruta de la recuperación de la industria parece estar lista y hay optimismo entre los empresarios tanto de Colombia como de los vallecaucanos.
Por ejemplo, la encuesta de la Andi muestra que para el 64,3 % de los industriales de la región la situación es favorable, este indicador es levemente más elevado que el registrado al cierre del año 2017 donde esta percepción la registraba el 63 % de los encuestados.
Esto se ratifica en la Encuesta de Ritmo Empresarial (ERE) que hacen 18 cámaras de comercio del país. Carlos Andrés Pérez, director Económico y de Competitividad de la Cámara de Comercio de Cali (CCC), explicó que los resultados de esta encuesta indican que el optimismo de los empresarios de la ciudad retornó después de un 2018 marcado por un entorno macroeconómico internacional poco favorable y la incertidumbre propia de los años electorales en el país.
Es así como el 47,9 % de los empresarios afiliados a la Cámara de Comercio de Cali espera que la situación económica del departamento, en los primeros seis meses de 2019, mejore o esté mucho mejor, 12,8 puntos porcentuales por encima de lo reportado en el primer semestre de 2018. Además, el 54 % de los empresarios caleños espera aumentar ventas durante estos primeros meses del año.
Otro aspecto alentador son las perspectivas de empleo. Según la Encuesta de Ritmo Empresarial 24 % de las empresas industriales del Valle del Cauca reportaron tener expectativas de aumentar el número de trabajadores. “La mejora se da por la reducción del porcentaje de compañías que espera despedir trabajadores, pasando de
15,8 % a 12,9 % en 2019”, destacó Carlos Andrés Pérez.
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Sobre estas perspectivas, Luis Fernando Tascón, gerente de Santa Anita Nápoles, dijo que durante el primer bimestre del año ya se sintió esa mejoría comparado con el 2018 cuando se vivió un periodo marcado por la incertidumbre de las elecciones presidenciales.
Explicó que el crecimiento esperado para el sector avícola no es muy alto porque se han tenido varios años con importantes repuntes del consumo, pero que las empresas sí esperan mejores resultados internos en materia de rentabilidad.
Para este empresario, las bases del optimismo industrial son: el despegue de muchos proyectos de infraestructura que no habían podido arrancar, lo que se reflejará en el empleo, el alza salarial de 2019 que considera fue significativa y ayudará a mejorar el poder adquisitivo de los hogares de menos recursos, y el aumento de la demanda.
La industria minera, la refinación del petróleo, la fabricación de productos farmacéuticos y los productos de caucho crecieron 1,3 % en el PIB 2018.
Sectores que repuntarán
De acuerdo con análisis de la Cámara de Comercio, tal vez el mejor impulso para la industria regional esté en el gran dinamismo que han mostrado las exportaciones de alimentos, así como toda la cadena de suministro ligada a este sector. “Las empresas de empaques, ingredientes e insumos para alimentos seguirán contribuyendo de forma destacada para que la economía del Valle siga creciendo por encima del total nacional”, explicó Carlos Andrés Pérez.
De esta forma, agregó que las empresas relacionadas con las actividades de los clusters de macrosnacks y proteína blanca seguirán impulsando la economía. “Estas dos agroindustrias son los principales generadores de carga de exportación e importación en el Valle, así que su desempeño en 2019 dinamizará la cadena logística relacionada”.
En el Valle también se esperan mejores resultados de la industria azucarera, por la expectativa de mayores precios internacionales del endulzante, y de los sectores de cosmética, construcción y farmacéutico.
Puntos a favor como mayor demanda, aumento de la confianza y estímulos tributarios hacen pensar que la ruta de la recuperación del sector está dada, aunque siguen latentes algunos riesgos.
El sector de textiles, confección de prendas de vestir; curtido de cueros y fabricación de calzado fue el único que presentó cifras negativas en 2018.
Riesgos en 2019
Para los empresarios y analistas los principales riesgos de la industria son internos y tienen que ver con:
-El aumento de costos logísticos y de infraestructura, el contrabando y la competencia desleal.
- El lento proceso de adaptación tecnológica y sofisticación productiva de algunas empresas, condición que pone el peligro su operación frente a la competencia. “Hay que acelerar el proceso de desarrollo tecnológico, la internacionalización y la sofisticación productiva”, dijo Carlos Andrés Pérez.
También hay riesgos internacionales:
- La posibilidad de que la recuperación de la economía mundial, en especial la de los socios del Valle y de Colombia, no sea la esperada.
- La reducción de la tasa de cambio, lo que puede generar un mayor nivel de importaciones.
Según los indicadores que publica el banco Davivienda, los industriales volvieron a prever un crecimiento de la producción en los próximos 12 meses.
Puntos a favor
- La expectativa de crecimiento económico de Colombia que podría estar este año en 3,3 %. Eso quiere decir que todos los sectores se mantendrían al alza.
- La demanda interna que seguirá a buen ritmo. Según analistas, este año se mantendrá como el principal soporte al crecimiento con una expansión de 3,0% en el PIB.
- El mejoramiento de la construcción, si el repunte del segmento de edificaciones se sostiene esto representa una demanda de insumos para la industria.
- La confianza industrial volvió a positivo en enero, lo cual parece reflejar que su senda de expansión se mantendrá, ya hay elevados niveles de uso de capacidad instalada.
- Los estímulos tributarios otorgados por la Ley de financiamiento.
4,5%
crecieron las ventas de las empresas del Valle en 2018.