El exministro de hacienda y actual profesor de la Escuela de Asuntos Internacionales y Públicos de la Universidad de Columbia, José Antonio Ocampo, expuso ante la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal), la propuesta de una reforma profunda en el sistema financiero internacional, basado en una nueva estructura que involucre redes de instituciones a nivel global, regional y subregional; generando muchos beneficios para las economías emergentes y las naciones más pobres.
Ocampo, presentó una conferencia titulada “Reformas al sistema financiero internacional”, y durante su intervención, se centró en cuatro temas clave para la reforma del sistema financiero: la banca multilateral de desarrollo, el sistema monetario internacional, la reestructuración de deudas soberanas y asuntos institucionales críticos.
Respecto a la banca multilateral de desarrollo, resaltó la importancia de un sistema densamente conectado que incluya tanto instituciones globales como regionales y subregionales. Destacó que, aunque esta estructura está bien establecida en el ámbito de los bancos multilaterales de desarrollo, no se ha aplicado adecuadamente en el sistema monetario internacional.
“La banca de desarrollo debe seguirse expandiendo, para ofrecer tanto soluciones estructurales como contracíclicas. Es esencial continuar con el financiamiento al sector público y ampliar el apoyo a la provisión de bienes públicos internacionales”, detalló el exministro.
En relación con el sistema monetario internacional, el profesor enfatizó que la volatilidad financiera global, ha llevado a los países en desarrollo a acumular mayores reservas internacionales, en comparación con las vistas en el pasado.
“La volatilidad de los flujos de capital es una de las principales fuentes de riesgo para las economías emergentes. Se necesita un uso más activo de los Derechos Especiales de Giro DEG, ojalá con dimensiones de desarrollo”, declaró José Antonio Ocampo.
En cuanto a la reestructuración de deudas soberanas, Ocampo señaló que los mecanismos existentes para renegociar deudas no ofrecen un alivio suficiente ni oportuno, y carecen de reglas uniformes para deudores y acreedores.
Argumentó que la crisis de endeudamiento público se ha exacerbado con la pandemia de COVID-19 y abogó por un nuevo mecanismo ad hoc, voluntario y considerado, que pueda contar con el respaldo de bancos multilaterales de desarrollo.
“Los problemas crecientes de endeudamiento público se agudizaron con el Covid -19 y continúan siendo muy severos. Se necesita mecanismo ad hoc de uso voluntario, teniendo en cuenta diferencias nacionales, y podría ser apoyado por bancos multilaterales”, detalló el exministro.
Ocampo subrayó la importancia de tres tareas fundamentales: continuar las reformas de las instituciones de Bretton Woods, aumentando la participación de los países en desarrollo en las decisiones; evolucionar hacia una estructura más representativa en el ámbito económico internacional; y construir una arquitectura financiera más compleja con múltiples niveles, incluyendo instituciones regionales sólidas.
El Secretario Ejecutivo de la CEPAL, José Manuel Salazar-Xirinachs, destacó la necesidad de ajustar el pensamiento y las recomendaciones a los rápidos cambios en el mundo, y señaló que la conferencia de Ocampo llega en un momento crucial de necesidades financieras para los países en desarrollo.
“Cambio tecnológico, cambio climático, cambio demográfico, cambio geoeconómico y geopolítico, por mencionar solo algunos, nos convocan a renovar nuestro pensamiento y a adecuar nuestros diagnósticos y recomendaciones a estos y otros cambios que han acaecido en el ámbito nacional, regional e internacional”.
Además, resaltó el papel de José Antonio Ocampo en la creación de la Plataforma Regional de Cooperación Tributaria para América Latina y el Caribe, aprobada por autoridades de 16 países en la Primera Cumbre Ministerial de Latinoamérica y el Caribe para una tributación global inclusiva, sostenible y equitativa, realizada en Cartagena, Colombia, en julio.