Moody’s Investors Service afirmó la calificación crediticia de Colombia, citando las sólidas instituciones del país.

En un informe, la agencia reiteró la calificación Baa2 de la Nación, el segundo nivel más bajo de grado de inversión, con una perspectiva estable.

Durante el primer año de la administración del presidente Petro, los pesos y contrapesos institucionales han funcionado, impidiendo una desviación significativa de la gestión política tradicionalmente prudente de Colombia, permitiendo solo cambios moderados en el marco de políticas del país”, dijo Moody’s.

Cabe mencionar que Moody’s es la única calificadora, de las tres grandes, que mantiene el grado de inversión del país, pues Fitch y S&P lo bajaron en 2021.

Moody's destacó los esfuerzos del Banco de la República para controlar la inflación. FOTO DANIEL REINA ROMERO REVISTA SEMANA | Foto: Semana

Se dieron varias razones para mantener la calificación. Por un lado, se señaló que “el marco institucional opera como un sistema de pesos y contrapesos, apoyando la calidad de las instituciones y la gobernabilidad del país. En particular, este marco previene de manera efectiva cambios en la política económica que marcarían una ruptura con el historial de Colombia de formulación prudente de políticas”.

De hecho, especificó que durante el primer año de la administración de Gustavo Petro, los contrapesos institucionales han impedido una desviación importante de la gestión de políticas tradicionalmente prudentes en el país, “permitiendo solo cambios moderados en el marco de políticas del país. El Congreso y el poder judicial han jugado un papel importante en este sentido con resoluciones de ambos que ayudan a preservar la dirección general de la política económica”.

Sobre las reformas, Moody’s indicó que un cambio en las alianzas políticas en el Congreso puede hacer que el presidente Petro revise los proyectos de salud, pensiones y laboral, para crear un consenso político. “Al hacerlo, es probable que las políticas resultantes conduzcan a preservar la estabilidad macroeconómica y fiscal”.

Por otro lado, Moody’s estableció que las métricas fiscales y de deuda de Colombia estarán alineadas con las de sus pares calificados de manera similar debido a la consolidación fiscal continua, “que estará respaldada por un aumento estructural en los ingresos del gobierno”.

La compañía afirmó que el Congreso y el poder judicial han jugado un papel importante en este sentido con resoluciones de ambos que ayudan a preservar la dirección general de la política económica. | Foto: Semana

“El marco establecido por la regla fiscal de Colombia continúa guiando el diseño y ejecución de la política fiscal. Moody’s espera que el plan del gobierno para aumentar el gasto social sea proporcional a los mayores recursos provenientes de mayores ingresos permanentes garantizados a través de la reforma tributaria de 2022, lo que aseguraría el cumplimiento de los límites de déficit de la regla fiscal”, informó en un comunicado.

La agencia agregó que el Gobierno ha seguido un conjunto de políticas que buscan aliviar las presiones fiscales del subsidio a los combustibles reduciéndolo gradualmente, señalando que el déficit generado por este subsidio (con el Fondo de Estabilización del Precio de los Combustibles) es un desafío fiscal importante.

Aunque la calificadora espera que la economía colombiana tenga un periodo de menor actividad entre este año y 2024, al mismo tiempo anticipa que la inflación continúe con su tendencia a la baja. Lo mismo sucedería con los desequilibrios externos, en medio del cumplimiento de la regla fiscal.

Sobre el papel del Banco de la República en medio del alza de la inflación, la agencia calificadora señaló que “en el contexto del choque inflacionario, el banco central continúa operando como una entidad autónoma que establece objetivos de política monetaria en línea con su mandato de metas de inflación”.

El ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla, aseguró que Moody’s recalcó la estabilidad de la política macroeconómica colombiana, “la persistencia en controlar los déficit fiscal y de cuenta corriente, la solidez de las instituciones que permiten que el país tenga un debate público y abierto, que se garantiza la autonomía y estabilidad del Banco de la República y que en el mercado internacional somos apetecidos por los inversionistas”.

Por su parte, el director de Crédito Público, José Roberto Acosta, resaltó que en medio de la turbulencia financiera que vive el mundo y con una Colombia muy endeudada, el actual Gobierno logró una reforma tributaria que “genera más impuestos y menos deuda y un plan financiero presentado oportunamente el año pasado, respetuoso de la regla fiscal y en aras de buscar la disminución de deuda sobre el PIB”.