El mercado cambiario en Colombia ha experimentado movimientos significativos en los últimos días, con el dólar estadounidense mostrando una tendencia al alza frente al peso colombiano.
Así mismo, este martes se conoció por parte del Departamento Administrativo Nacional de Estadísticas (Dane) el resultado del Producto Interno Bruto para Colombia en el segundo trimestre de 2023, los cuales muestran que para este periodo el incremento fue de apenas el 0,3 %, la cual se ubica por debajo de los reportes y pronósticos que se tenían en el mercado desde hace varias semanas.
Así las cosas, este miércoles 16 de agosto, el dólar arrancó en $4.090,00, una subida de $1,25 frente a su cierre del martes de $4.088,75.
Pero al final de la sesión, la moneda terminó con un ascenso hasta los $4.119,00, es decir un 0,73 % o $30,25 más, si se compara con el martes.
En su máximo precio de la jornada llegó a los $4.158,00. Y tuvo un precio mínimo en $4.080,00, el cual no alcanzó a bajar de la barrera de los $4.000.
Por su parte, el precio promedio, que es la base que se tiene para determinar la Tasa Representativa del Mercado, también quedó arriba de los $4.100, específicamente en $4.095,93, $65,98 o 1,63 % más que la TRM que rige este miércoles que está en $4.096,08.
Gremios le piden al Gobierno crear un plan de reactivación económica
La desaceleración de la economía colombiana en el segundo trimestre del 2023 (creció 0,3%) llevó nuevamente a los gremios de la producción a pedir un plan de choque que permita recuperar el dinamismo perdido.
Ante esto, la presidenta de la Cámara de Comercio Colombo Americana (AmCham Colombia), María Claudia Lacouture, dijo que para que a economía no entre en recesión se requiere, “de manera urgente”, de un plan de choque articulado entre sector público y privado para reactivar sectores como de la construcción que tiene una marcada caída, de comercio y reparación de vehículos e industria manufacturera que están en terreno negativo.
“Desde AmCham Colombia reiteramos la disposición para trabajar en líneas estratégicas que presentamos al presidente Gustavo Petro para construir y poner en marcha el plan de reactivación económica, que dé viabilidad empresarial para generar empleo formal y sostenible, al tiempo que se sigue con el esquema de responsabilidad macroeconómica y fiscal”, dijo la ejecutiva.
De igual manera, Jaime Alberto Cabal, presidente de Fenalco, reiteró la necesidad de que el Gobierno Nacional convoque al sector privado para construir, en conjunto, un plan de choque y activación, que mitigue el impacto de esta coyuntura económica.
De acuerdo con la información del Dane, se observa un duro contraste con el comportamiento de la economía en el segundo trimestre del año anterior. El clúster del comercio pasó de crecer 21,9% a sufrir un desplome de -3.2%.
Sobre el tema Bruce Mac Master, presidente de la Andi, dijo que si bien el resultado del PIB era de alguna manera esperado, no deja de ser alarmante. “Además, se calcula que en el primer semestre del año el crecimiento del PIB varió apenas 1,7%, una cifra baja e insuficiente a la luz de las expectativas y necesidades que tiene el país”.
Por ello, se unió al llamado gremial de que se tomen medidas contracíclicas que contribuyan a contrarrestar los efectos de la desaceleración. “Además, desarrollar e impulsar una agenda de crecimiento económico sostenida en el tiempo debe ser una prioridad para todos, pues solo promoviendo las condiciones correctas que motiven la creación de empresa y la inversión, se podrán generar más puestos de trabajo formal”, dijo.
El presidente Gustavo Petro reconoció el retroceso de la economía y le solicitó al Banco de la República bajar las tasas de interés. “Un retroceso en la economía real trae como consecuencia una crisis financiera sistémica, por tanto aumentar la producción se vuelve un imperativo. El gobierno debe tener una política contracíclica. Impulsar con su actividad la economía popular rural y urbana a través del crédito barato y subsidiado”, señaló el mandatario.
Los resultados
Jackeline Piraján, economista de Scotiabank Colpatria, dice que lo bueno es que las cifras muestran que el sector de recreación, cultura, esparcimiento y actividades artísticas sigue contribuyendo de forma positiva, lo que quiere decir que los hogares siguen demandando servicios.
Por otro lado, desde el sector público “vimos una mejor ejecución, todavía identificamos que no a plena capacidad, pero sí contribuyendo a que el crecimiento de Colombia fuera un poco más positivo.
Pero desde el punto de vista de la demanda “observamos que el consumo está bastante debilitado cuando se trata de comprar bienes como por ejemplo televisores, neveras, línea blanca, vehículos, pero sigue siendo algo robusto cuando se enfoca en el consumo de servicios”.
Fabián Suárez, investigador de Anif, dijo que con todo y si bien la economía evitó entrar en terreno negativo en el segundo trimestre, el corrido del año muestra una tímida variación de 1.7%. “Sectores clave como la industria y el comercio, que son un importante termómetro de la demanda, vienen registrando decrecimientos y comprometen el desempeño promedio de la economía en el segundo semestre del año”.