Este viernes 21 de junio, después de un repunte notorio, el dólar cerró la jornada a la baja. Durante el incremento de esta semana, se publicaron los datos del reclamo de subsidios de desempleo en EE.UU. y la decisión del Banco de Inglaterra de dejar las tasas de interés en el Reino Unido en 5,25%, su nivel más alto en 16 años.

La divisa cerró en un promedio $4.143,67 ubicándose $32,29 abajo de la de la Tasa Representativa del Mercado que para este viernes estaba en $4.175,96. La moneda tocó un máximo de $4.166 y mínimos de $4.130,15. Se realizaron 1.651 movimientos por un monto de US$1.231 millones.

Según Reuters, las bolsas mundiales cotizaban con cautela el viernes, mientras el dólar a nivel global alcanzaba máximos de varias semanas y los mercados esperaban a que las encuestas empresariales de Estados Unidos dieran pistas para determinar si la mayor economía del mundo sigue siendo lo suficientemente fuerte como para soportar unas tasas de interés elevadas.

La divisa cerró en un promedio $4.143,67 ubicándose $32,29 abajo de la de la Tasa Representativa del Mercado que para este viernes estaba en $4.175,96. | Foto: Thomas Jackson

Algunas proyecciones del dólar

Aunque no se conoce con ciencia exacta cuando la divisa tendría una tendencia más a la baja, sí existen algunas proyecciones sobre el dólar.

La Dirección de Investigaciones Económicas, Sectoriales y de Mercado de Bancolombia recordó la volatilidad de la divisa. “El dólar se ha fortalecido a nivel global en un contexto de menor apetito por riesgo de los inversionistas. ¿El motivo del cambio? La expectativa de que la Reserva Federal recortará menos su tasa de interés este año”.

Según las proyecciones del Banco de la República, la divisa a finales del 2024, se va a mantener sobre la barrera de los 4.000, específicamente se ubicará un promedio de 4.081 pesos.

Cabe recordar que el Banco de la República precisa que “el carry trade de monedas es una estrategia de inversión ampliamente utilizada por especuladores en la cual el inversionista se endeuda en una divisa con baja tasa de interés (moneda de fondeo) e invierte ese dinero en una divisa con alta tasa de interés (moneda destino)”.

*Con información de Colprensa y redacción de El País.