La estanflación corresponde como tal a un periodo en el que la economía de un país no crece, pero que sí registra un aumento continuo en la inflación.
En ese sentido, según las palabras del investigador asociado y profesor de la universidad de Nueva York en Abu Dabi, Javier Mejía, la estanflación es “un fenómeno que combina un rápido aumento de los precios con un pobre desempeño de la economía”.
“Se empezó a hablar del fenómeno en los años 70 cuando en buena parte del mundo occidental el ‘boom’ económico de la posguerra se detuvo y la inflación estaba fuera de control”, puntualizó Mejía.
Y es que, precisamente, a lo largo de los años, los analistas han coincidido en que la estanflación es uno de los peores escenarios en los que se puede ver un país, pues, los altos niveles de inflación representan un obstáculo para que la economía se recupere.
“Sería pésimo que la inflación aumente en momentos en que la economía está golpeada, pues, hará más difícil la recuperación. Los estímulos monetarios y fiscales para reactivar el aparato productivo pueden generar más inflación, lo cual reduce la efectividad de las decisiones de política económica”, así lo explicó Julio Romero, economista, quien, para el año 2021 era jefe de Corficolombiana, según declaraciones recogidas por SEMANA.
De hecho, la estanflación afecta directamente a los hogares, los cuales, principalmente, se ven golpeados en su poder adquisitivo. Sobre este tema, también, el investigador asociado y profesor de la universidad de Nueva York en Abu Dabi dijo que se trataba del peor de los mundos.
“Como la economía está estancada, hay alto desempleo y en general las oportunidades económicas son pocas, y como a eso se le suma un aumento sostenido de los precios, el poder adquisitivo de los hogares se reduce sistemáticamente”, agregó Javier Mejía.
Y ahora en lo que ha sido el año 2023 se ha recordado el fenómeno de la estanflación, pues, en los últimos meses, el presidente de Colombia, Gustavo Petro, ha respaldado la propuesta de que el Banco de la República baje las tasas de interés, anhelando así, también, que se le dé un respiro a los colombianos.
Pero algunos expertos han manifestado que se trata de una opción no válida financieramente, pues, desataría un choque de fenómenos económicos.
“Atribuirle al Banco de la República la culpabilidad de la situación económica y pedirle que se bajen las tasas de interés no es la solución, ya que podríamos aproximarnos a lo peor de los dos mundos: estancamiento económico y alta inflación”, citó el portal digital e informativo de Pulzo, según las declaraciones del presidente de Fenalco recogidas por la emisora Blu Radio.
Entonces, como tal, al estancamiento económico y alta inflación se le conoce como estanflación que, de caer ahí, sin lugar a dudas, traería graves y preocupantes consecuencias que afectarían directamente a la economía del país, ciudadanos y hogares.
Lo que sí se debe tener en cuenta es que el fenómeno está relacionado con el estancamiento e inflación, los que, de cruzarse, pueden provocar un fuerte golpe. A pesar de ello, conservan una correlación significativa.
“Esto se debe a que las soluciones que se propugnan para controlar la inflación o para reactivar la economía actúan en dirección contraria. Para combatir la inflación se suelen tomar medidas que frenen el consumo, como elevar los tipos de interés, aumentar la presión fiscal, entre otros, lo que al mismo tiempo reduce el crecimiento económico; mientras que para reactivar la economía se intenta incrementar el consumo bajando los tipos de interés, aumentando el gasto público y más, lo que hace subir los precios, y consecuentemente la inflación”, citó Pulzo de acuerdo con la explicación entregada por el Banco Santander.