Más de 60 empresas del Reino Unido decidieron participar de una prueba organizada por la Asociación 4 Day Week Global y las universidades de Cambridge y Boston College, en la que tres mil asalariados trabajaron un día menos por semana, conservando el mismo salario.

Los resultados de la prueba, según un comunicado emitido por al Asociación, mostraron que nueve de cada diez compañías seguirán aplicando la semana de 4 días, ya que no vieron afectada su producción con la semana reducida de trabajo.

Según los investigadores, los beneficios siguieron estables en promedio durante la experiencia (+1,4% durante el ensayo) e inclusive aumentaron en un 35% con relación al mismo periodo de 2021, y además se registraron menos renuncias, ausentismo y se hicieron más nuevos contratos.

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El estudio destacó que hubo "mejorías significativas en materia de salud física y mental, más tiempo dedicado al ejercicio y satisfacción global en la vida y en el trabajo".

También se registraron "menos tasas de estrés, agotamiento profesional y fatiga, así como baja en los problemas de sueño".

Inicialmente, 70 empresas se inscribieron para participar en el proyecto, pero nueve renunciaron antes del inicio porque no estaban suficientemente preparadas, precisaron los organizadores.

La experimentación de la semana de cuatro días de trabajo ha aumentado recientemente en Europa, Estados Unidos, Canadá, Australia y Nueva Zelanda.