La Superintendencia de Sociedades confirmó este martes, 21 de enero, la decisión de someter al máximo grado de supervisión, denominado “control”, a la sociedad Monómeros Colombo Venezolanos, tras resolver un recurso de apelación.
El pronunciamiento de la Supersociedades se dio en respuesta a los recursos de reposición y apelación que fueron interpuestos ante la medida anunciada por primera vez el pasado 11 de diciembre. Tras estudiar los recursos, se confirmó que la productora de fertilizantes seguirá bajo supervisión.
Según el ente de control, la decisión se tomó con el objetivo de preservar la sostenibilidad de la empresa, como una unidad productiva y fuente generadora de empleo, ante la difícil situación financiera de la compañía anunciada meses atrás.
El denominado “control” no es una toma de posesión ni habilita a la Superintendencia para coadministrar la sociedad, pues dicha entidad conservará su autonomía, aunque con ciertas limitaciones, detalló la Supersociedades.
El máximo grado de supervisión faculta a la Superintendencia para realizar acciones como promover la presentación de planes y programas de mejoramiento y autorizar otorgamiento de garantías que recaigan sobre los bienes de la sociedad y operaciones fuera del giro ordinario de los negocios.
El ente de control también está facultado para reformas estatutarias y capitalizaciones, así como para convocar a la sociedad a un proceso de insolvencia, entre otras decisiones.
”Producto del seguimiento a la situación de la sociedad, que viene de tiempo atrás, por su relevancia para el sector del agro colombiano, se advirtió que presentan oportunidades de mejora en su situación financiera y requieren en esa medida de un mayor acompañamiento, una supervisión más cercana y profunda, tendiente a su preservación y fortalecimiento como unidad productiva y fuente generadora de empleo”, explicó el superintendente de Sociedades, Billy Escobar, sobre la decisión.
El funcionario, además, detalló que luego de confirmarse la decisión el paso a seguir es que Monómeros elabore y trabaje en planes y programas de mejoramiento, que serán objeto de monitoreo por la Superintendencia de Sociedades. De esa manera, el ente de control continuará el análisis de su situación y evolución para adoptar las medidas necesarias.
Cabe recordar que, desde Caracas, Álex Saab estaría buscando vender la poderosa productora de fertilizantes venezolana que funciona en Barranquilla. La decisión del régimen de vender los activos tangibles e intangibles de la compañía pretende eludir las sanciones que Estados Unidos impondría en julio de este año.