La tienda de barrio es uno de los íconos más representativos de las ciudades colombianas. No hay un sector que se escape de tener a un tendero que sirva como punto de encuentro para los vecinos; tan solo en Cali operan más de 17.000 de estos establecimientos, según Fenaltiendas.

Sin embargo, el vertiginoso crecimiento de grandes cadenas comerciales y formatos de bajo costo (Oxxo, ARA, D1), podría estar amenazando este negocio tradicional en el país. Según un estudio realizado por la firma Raddar, el 41,1 % de los colombianos realiza algún tipo de compra en estos nuevos formatos, por ejemplo, D1 tiene más de 2400 puntos de venta en Colombia y en el Valle del Cauca más de 210 tiendas.

Mientras que cadenas internacionales como Oxxo van en esa misma línea y su objetivo es convertirse en una nueva alternativa para los consumidores caleños. En el 2023 hicieron su arribo a la ciudad y aspiran culminar el año con 37 tiendas abiertas.

La tienda de barrio es el negocio más popular en el país

Andrés Morales, director general de la sucursal Colombia, mencionó algunas distinciones de este formato como la operación 24 horas, 7 días de la semana, además de incorporar proveedores locales a su oferta, en el caso de Cali, algunas marcas como Calima se encuentran en las estanterías del coloso mexicano que espera alcanzar las 100 tiendas en un lapso de cinco años.

Pero, pese a esta competencia, las tiendas siguen vigentes y dan la pelea. Samir Campo, vicepresidente corporativo de Raddar, dice que una de las razones para que estas sean preferidas aún en el mercado son los hábitos de compra de algunos consumidores. Por ejemplo, destacó la posibilidad de que las personas compren presentaciones más pequeñas de los productos, lo cual no puede hacer en otras superficies.

Asimismo, Martha Lucía Morales, gerente de Desarrollo Empresarial de Fenalco Valle y líder del programa Fenaltiendas en la región, aseguró que otro factor de éxito para las tiendas es la posibilidad de ofrecer crédito a los consumidores. El popular ‘fiado’ se convierte en un elemento que permite fidelizar a la clientela, gracias a la relación de confianza construida entre el tendero y su vecino.

Según Fenalco, el 43 % de los tenderos del país son mujeres, Cali no es la excepción a esa tendencia y muestra de ello es el trabajo realizado por Victoria Eugenia Salazar, una caleña que es propietaria de una tienda ubicada en el tradicional barrio de San Nicolás, en el centro de la capital vallecaucana.

Muchas tiendas de barrio se han convertido en mini supermercados donde se encuentran también frutas y verduras | Foto: Semana

Reconoce que ha sido una tarea ardua, en sus inicios, su tienda se limitaba a un espacio muy pequeño en su vivienda y, con el tiempo, gracias al apoyo de sus vecinos, quienes son sus principales clientes, pudo constituir un local mucho más grande donde vende abarrotes, gaseosas, pan, artículos de aseo personal y limpieza del hogar. Una de sus innovaciones ha sido la inclusión de un datáfono que le permite ofertar servicios como corresponsal bancario.

Esta tecnología, reconoce que le genera un flujo considerable de clientes, en sus cálculos alrededor de 200 personas pueden ir durante un día a su tienda.

Un análisis realizado por el Grupo Bit by Teamcore da otra razón por las que las tiendas de barrio aún prevalecen. Ellos identificaron que los tenderos colombianos tienen un potencial de adaptación muy grande ante las nuevas tendencias, lo que les está dando herramientas para enfrentar la competencia.

“Según Nequi, el 37 % de sus clientes corresponden a negocios de barrio como tiendas, lo que no solo facilita las transacciones, sino que permite ajustarse a las preferencias de pago de los consumidores”, indica el informe.

Es por esto y por la cercanía de las tiendas con el consumidor, que el presidente de la Junta Directiva de Fenalco Valle, Octavio Quintero, sostiene que las tiendas de barrio son uno de los bastiones más importantes de la economía, no solo por la penetración que poseen en el mercado, sino por la función social que cumplen al ser una de las figuras más cercanas a la comunidad.

El desafío de la formalización

Ante ello, el secretario de Desarrollo Económico de Cali, Edwin Maldonado, insistió en la necesidad de implementar un plan estratégico que apunte al progreso de los comerciantes de los barrios.

Explicó que en los próximos días se dará inicio al proyecto ‘Mi Cali bella, mi barrio vende’, el cual permitirá sumar esfuerzos con diferentes actores del ecosistema empresarial para desarrollar acciones de gran importancia en las comunidades de la ciudad y así facilitar el paso a la formalidad de los microempresarios.

La inclusión financiera hace parte de la modernización de las tiendas de barrio. | Foto: Peter Cade

En Cali había 3639 tiendas inscritas en Cámara de Comercio, al cierre del primer semestre del 2024, de las 17.000 que podrían existir. Los barrios con mayor cantidad de establecimientos registrados son San Pedro, Ciudad Córdoba, Floralia, Terrón Colorado, Lili, Marroquín II Etapa y la Nueva Floresta.

Cadenas de bajo costo, las nuevas favoritas

Un estudio realizado por la firma NielsenIQ identificó que los colombianos prefieren hacer mercado en tiendas como D1 o Ara. En comparación con el año 2022, este canal de distribución ha tenido un crecimiento del 12,1 %. Entre los productos más comprados en estos establecimientos se encuentran el papel higiénico, leche, aceite, carnes frías y productos para la limpieza del hogar como detergente, jabones y limpiadores de piso.