La importancia de los biocombustibles, en particular el biodiesel de aceite de palma y el bioetanol de caña de azúcar, para la descarbonización de la economía de Colombia y garantizar una movilidad sostenible en el país fue uno de los temas principales de la IV Conferencia Internacional de Biocombustibles, en la ciudad de Cali.
La jornada estuvo marcada por la exposición de los biocombustibles como una solución inmediata para el sector aeronáutico, ya que esta industria debe reducir sus emisiones de gases de efecto invernadero en un 51% para 2030, y Colombia tiene el potencial para ser un importante productor de biocombustibles sostenibles para este sector.
“Si Colombia desarrolla una mayor capacidad instalada de biocombustibles, se podrían crear hasta 49 mil empleos adicionales en toda la cadena de valor y atraer inversiones cercanas a los mil millones de dólares en el país”, afirmó Carolina Rojas, presidenta ejecutiva de Fedebiocombustibles.
Así mismo, el Viceministro de Energía, Cristian Diaz, instó a la industria a incrementar las mezclas de etanol al 10%, además resaltó la importancia de los biocombustibles en la transición energética del país, junto con la matriz eléctrica y solar firme.
El vicepresidente de Asuntos Federales para Combustibles Limpios Alliance America, Kurt Kovarik, resaltó las principales diferencias del SAF, diésel renovable y biodiésel respecto a los combustibles fósiles, las cuales son la intensidad de carbono, beneficios en salud, apoyo a la agricultura, la creación de empleos y el crecimiento en transporte.
En este sentido, de acuerdo con Cid Caldas, coordinador General para Sugarcane y Evandro Gussi. CEO de UNICA Brazil, se deben crear instrumentos regulatorios que puedan garantizar la producción de biocombustibles, lo cual sería un beneficio tanto para los productores, como para el gobierno y el mercado.
Los biocombustibles no solo son un programa de descarbonización, ya que los combustibles líquidos sostenibles son también un programa de inclusión social que benefician a las comunidades cercanas a la industria. “Cabe resaltar que con 1.700 millones de etanol se han reemplazado cerca de mil millones de gasolina, lo cual ha implicado una reducción de 7 a 8 millones de toneladas de co2.
Lo anterior corresponde a que hubiésemos sembrado casi 700 millones de árboles, es por esto que el bioetanol sin duda tiene un aporte inmenso al sistema ambiental”. Claudia Calero, presidente de Asocaña. Carolina Rojas moderó el panel Los rostros detrás de los bios, donde las mujeres y los hombres que transforman las materias primas de los biocombustibles presentaron su visión sobre el Programa Nacional de Biodiesel y Bioetanol.
Durante los 3 días del evento se abordó la necesidad de desarrollar políticas públicas y de colaboración público privada para lograr los objetivos de la transición energética propuesta por el gobierno.
De acuerdo con cifras de Greenpeace, solo en Bogotá hubo 3.400 muertes prematuras que se pueden atribuir a la exposición de material particulado emitido por vehículos. “Debido a la composición química de los biocombustibles, al ser mezclados con los combustibles fósiles, reducen de manera proporcional las emisiones de material particulado y mejoran de manera sustancial la calidad del aire que respiramos, al mismo tiempo que el rendimiento del motor de los vehículos”, Aseguró Rojas.
La Federación Nacional de Biocombustibles de Colombia es un gremio del sector privado sin ánimo de lucro que desde el año 2004 agrupa el sector de los biocombustibles en Colombia con el objetivo de consolidarlos mediante la puesta en marcha de múltiples iniciativas tecnológicas, científicas, académicas y gremiales.