Según la Organización Mundial de la Salud, OMS, los problemas de depresión y ansiedad tuvieron un incremento considerable durante el primer año de pandemia, que, sumado a 1250 millones de personas que tienen algún otro trastorno psicológico distinto, genera un estado de alerta sobre la salud mental a nivel internacional. Algunos expertos, incluso, se atreven a afirmar que nos encontramos frente a una nueva pandemia.

De acuerdo con la doctora Viviana Álvarez, especialista en neuropsicología y decana del programa de Psicología de la Fundación Universitaria de Ciencias de la Salud, FUCS, “el incremento notorio en las remisiones para consultas de primera vez, tanto por psicología como por psiquiatría, han hecho evidente que el mundo se enfrenta ahora a una crisis por salud mental”.

Le puede interesar: Alerta por el aumento de suicidios en Cali: este año se han reportado 67 casos

En Colombia un buen porcentaje de niños, jóvenes y adultos han tenido problemas para concentrarse, sufren de pérdida del sueño o sienten que no pueden superar las dificultades. Para la doctora Álvarez, esto ha causado que las remisiones y consultas en psicología clínica y psiquiatría pediátrica vayan en aumento.

“Hay una queja recurrente por parte de la población. Aún en medio de las consultas de medicina general, los pacientes manifiestan que se sienten nerviosos, preocupados, angustiados y no pueden dormir, esta última es una de las características más importantes de la enfermedad mental”, manifestó la especialista.

El Informe Mundial sobre Salud Mental reveló que los trastornos mentales están gravemente desatendidos, casi la mitad de la población mundial vive en países en los que solo hay un psicólogo o psiquiatra por cada 200.000 habitantes, esto sin tener en cuenta que la mayoría de las personas que sufren alteraciones de este tipo, no recibe ningún tratamiento por diferentes causas que impiden que busquen ayuda, como la mala calidad de los servicios, los bajos niveles de conocimientos sobre salud mental, la estigmatización, la discriminación y la falta de recursos económicos.

Álvarez resaltó que en Colombia, “tenemos cada vez más población con necesidades en atención psicológica y psiquiátrica. Desde todas las entidades se está requiriendo una mayor agenda de psicólogos. Las unidades de salud mental que atienden niños y adolescentes tienen una ocupación importante y los psiquiatras infantiles y psicólogos clínicos del área pediátrica no tienen la frecuencia de consulta necesaria para brindar mayor cobertura y servicio de calidad”.

Lo que realmente preocupa a la Fundación Universitaria de Ciencias de la Salud es la falta de profesionales en Colombia para el tratamiento psicológico, frente a la cantidad de pacientes que se remiten a una evaluación de su salud mental. “Luego de una consulta por primera vez en psicología clínica y psiquiatría, los controles no tienen la frecuencia que se necesita y esto genera que el paciente entre en crisis y que necesite atención intramural. Es evidente que no tenemos la cantidad de psicólogos que se requieren para ayudar a la población nacional”, aseguró la decana del programa de Psicología de la FUCS.

Le puede interesar:Opinión: la preocupante realidad de la salud mental en tiempos de pandemia 

A pesar de la política de salud mental de 2018, a través de la cual hay una cobertura importante para la prestación de servicio en psicología y psiquiatría en Colombia, el país no cuenta con el personal suficiente.

“En Colombia hay alrededor de 143 programas de Psicología, entre a distancia, virtuales y presenciales, lo cual indica que hay buen número de personal en formación y que los servicios son de calidad”. Sin embargo, es necesario garantizar que los profesionales de la psicología cuenten con sus prácticas idóneas en tiempo y espacio en el área clínica, ya que esto hace realmente la diferencia”, explicó Viviana Álvarez respecto al informe de la OMS que realiza un llamado a disponer de personal competente.