Duras críticas a la política de seguridad del presidente Gustavo Petro hizo la alcaldesa de Bogota, Claudia López, quien está a menos de dos meses de dejar el cargo.
La alcaldesa aseguró que la seguridad y conveniencia en todo el país mejorarán cuando el Presidente “asuma su deber de liderar a todas las ramas del poder público nacionales y territoriales en seguridad y justicia ciudadana”.
Según López, los alcaldes no tienen ni las herramientas ni las facultades para garantizar la seguridad en las ciudades y se quejó de que, a pesar de que los alcaldes cumplieron con la tarea de coordinar con la Policía y la justicia, “nos quedamos solos y sin respaldo de la Presidencia y la Rama Ejecutiva y Judicial Nacional”.
De paso, hizo fuertes críticas a la política de Paz Total. Calificó como errática su política “de dar impunidad a diestra y siniestra a los grupos criminales en todo el país, a la vez que deja deteriorar la economía y el empleo”.
Con ella, sostiene, los grupos criminales se han envalentonado y han aumentado sus ingresos y su presencia territorial.
“En vez de corregir ese cóctel de desgobierno, fragmentación y envalentonamiento criminal, el Presidente decidió asumir los resultados electorales locales dividiendo entre amigos y no amigos a los alcaldes y gobernadores recién electos, en vez de unirlos y apoyarlos a todos en la lucha contra la pobreza, la informalidad, la corrupción, la criminalidad y la impunidad que son los cinco factores que concurren y reproducen ciclos de violencia e inseguridad y fracturan la gobernanza y legitimidad estatal, tanto local como nacional”, agregó.
La nueva andanada de López contra Petro se suma a una larga lista de declaraciones que ha dado desde antes de las elecciones del 29 de octubre, y después de conocerse los resultados de las mismas.
El motivo inicial de la tensión entre ambos fueron las diferencias que tienen por la construcción del metro de Bogotá.
Petro, es de recordar, viajó antes de las elecciones a China y, según muchos analistas políticos, uno de los principales objetivos de dicho viaje fue intentar cambiar lo ya acordado por la Alcaldía de Bogotá con el consorcio chino que ganó la licitación para la construcción de la primera línea del Metro.
En medio de esa discusión, López planteó desde su cuenta de Twitter: El petrismo insiste en parar la línea 1 del metro, demorarse unos 10 años más y pagar $ 15 billones más. Y dos candidatos del Nuevo Liberalismo lograron parar el Corredor Verde y el juez ordena que nunca se podrán hacer carriles exclusivos para buses eléctricos. En ambos casos, se pierde la inversión ya realizada y toca empezar de nuevo”.
En su momento, el Presidente respondió señalando que López no ha dicho la verdad a la ciudadanía sobre el proyecto del Metro.
“Ahora lo que queremos es acelerar el Metro y entregar el mejor servicio posible a la ciudadanía bogotana y liberar a la ciudad de las cargas financieras de la primera línea, tal como se hizo con la primera línea del Metro de Medellín. Si Medellín lo hizo, ¿por qué no Bogotá? Es un gana-gana”, dijo Gustavo Petro.
La posición de Petro, a juicio de muchos observadores, fue uno de los factores que llevó a la estruendosa derrota del candidato de la izquierda, Gustavo Bolívar, en las elecciones por la Alcaldía de Bogotá.
Pese a ello, Petro no se quedó callado y recientemente propuso incluso que se haga un referendo para consultar a los bogotanos si el tipo de Metro que quieren es el que está contratado.
Este hecho desató una dura respuesta de López, quien en su momento le increpó diciéndole: “Muchos, incluyéndome, duramos un año diciéndole ‘Presidente, usted es presidente, no está contento?, ¿Le parece poquito?’ Tanta lucha y ahora otra vez quiere ser alcalde, no, la Alcaldía no está vacante, apreciado presidente, usted lo que se ganó fue la Presidencia, por qué no se ocupa de sus temas, sus prioridades, de las regiones de Colombia abandonadas, en vez de venir a tomar decisiones que ya tomamos en la Alcaldía”.