La comunidad del manga y el anime está de luto, después de que se dio a conocer el fallecimiento de Akira Toriyama, creador del que se se considera el anime más famoso del mundo: Dragon Ball y todas sus sagas. Un hombre que dejó una huella indeleble en la industria del entretenimiento japonés.
“Es una pérdida muy grande, por todo lo que significó Akira Toriyama con la serie de Dragon Ball, para la historia del anime en general”, explica Daniel Molina, fanático de la serie. Idea con la que concuerdan los seguidores de este anime, que inició como un manga (palabra japonesa para designar las historietas en general). Dialy Cerón, líder de la comunidad Dragon Ball Z Colombia, considera que, “la pérdida de Toriyama es incalculable, ya que además de crear el anime más importante de la historia seguía trabajando en algunos proyectos”.
A los 68 años, el japonés murió a causa de un hematoma subdural agudo el pasado 1 de marzo. Sin embargo, no fue sino hasta este viernes 8 de marzo, que su casa productora, Bird Studio, compartió la noticia con el mundo, e informaron que los funerales del creador ya tuvieron lugar de manera privada, con la asistencia de su familia y unos pocos allegados, un homenaje póstumo a la personalidad reservada de Toriyama.
“Él fue una persona muy discreta. El ilustrador más importante de la historia del manga moderno, se mantuvo siempre humilde, alejado de las cámaras. Que su muerte se diera a conocer siete días después y las reservas del funeral, es una demostración a lo que él era”, cuenta Andrés Julián Trujillo, periodista y fanático de la serie.
Nacido el 5 de abril de 1955 en Nagoya, Japón, Toriyama entró en el mundo de la ilustración a finales de los años setenta con obras como Dr. Slump, una comedia extravagante sobre las travesuras de una niña llamada Robot Arale —incluso se rumora que existe un spinoff en el que Goku se encuentra con el Dr. Slump—. Sin embargo, fue con Dragon Ball, que se centra la historia de un niño alienígena llamado Goku que es enviado a la Tierra, publicado por primera vez en la revista Weekly Shonen Jump en 1984, que Toriyama alcanzó el reconocimiento internacional.
Este viernes, la productora Bird Studio de Toriyama, en el comunicado, expresó la profunda tristeza por la pérdida del ilustrador, y mencionó que su legado y proyectos continuarán presentes en la industria.
El mensaje de la productora, es una respuesta adelantada a los cuestionamientos que surgieron por parte de sus fanáticos sobre lo que pasaría con su éxito más reciente, Sand Land, continuación de Dragon Ball Super. El ilustrador, además se encontraba trabajando en el proyecto del 40 aniversario de Dragon Ball, que ahora muchos de sus seguidores consideran que tienen un futuro incierto.
“Los fans de Dragon Ball nos vamos a privar de seguir disfrutando de sus ideas, de esos giros argumentales, y de ese crecimiento que le dio a cada uno de los personajes. En especial no podremos disfrutar de su imaginación, porque el hecho de crear todo un universo con Dragon Ball, es un trabajo de una persona con una creatividad más allá de lo sobresaliente y con una sensibilidad especial”, explica Molina.
Su influencia en la industria es incuestionable, considerado un modelo a seguir por muchos artistas, al construir las bases para muchos mangakas (artista de cómics).
“Dragon Ball reúne una cantidad infinita de personajes, cada uno con su propia personalidad, que de alguna manera permea en el mundo de los hombres. Su estilo de dibujo es más bien básico, muy bueno, sí, pero no especial (teniendo en cuenta que los personajes son similares en cuanto a los rasgos como la cara y los cuerpos). Lo que hizo que la serie se convirtiera en un clásico es en definitiva la narrativa de la historia”, cuenta Santiago Gómez, profesor de diseño de la Universidad Autónoma de Occidente, quien recuerda que fue Toriyama, quien lo inspiró a estudiar la carrera de diseño.
“Cuando estaba en el colegio dibujaba a Gokú, este fue mi primer personaje. Para mí en el colegio era difícil aprender a hacerlo, pero me inspiraba, porque era fanático. Es una historia que me inspiró no solo a seguir por este camino, sino a ser mejor persona”, recuerda Gómez.
Como Santiago, son muchos quienes crecieron y se identificaron con el saiyajin (una raza de guerreros de otro planeta en el universo Dragon Ball) de corazón puro, que, según Julián Trujillo, “en medio de la comedia y los mensajes sexualizados, presentaba una posición clara sobre ser buena persona, los valores y la inocencia”.
“Sin duda es una historia fácil de entender, llena de personajes entrañables, aventuras, valores intrínsecos, humor y batallas épicas, esto hizo que sea una obra que conquistó el corazón de sus fanáticos, además del hecho de que muchos vimos crecer a Gokú, a la par. Era la serie que nos hacía correr a casa después del colegio a ver una nueva aventura”, manifiesta Dialy Cerón.
De ahí que, para tantas personas alrededor del mundo, y lo que se puede identificar en Colombia tenga tanta importancia esta producción animada, que marco varias generaciones, tanto así que “así sea una serie que vimos en la infancia, es un programa que si pasamos por los canales y están dando un capítulo paramos para volver a ver”, asegura Daniel Molina.