Después de vivir un proceso de limpieza física e interior en una clínica de Belgrado, Serbia, el cantautor barranquillero Andrés Cabas regresa, después de un año de silencio musical, con su canción Amor y Traición.
Al padecer problemas en el hígado, arritmia cardíaca, triglicéridos altos, anemia y falta de apetito, el responsable de éxitos como Bonita, Tu Boca, Mi Bombón, Increíble, Fiesta de Tambores, La Cadena de Oro, debió acudir a la experiencia de la Ibogaína para desintoxicar su organismo, aunque no entra en detalles, reconoce que está “muy recuperado”.
Hablemos de amor y traición
Es el nombre de la nueva canción que estamos lanzando primero y que hace parte de un disco que estaremos presentando en agosto o septiembre. Hice este tema con George Noriega, productor muy aclamado, que habla de emancipación y resurrección. Es una manera alegre y consciente de aceptar que en la vida, a veces, y sobre todo en las relaciones amorosas, hay cosas duras que no salen como uno quisiera, pero vienen seguidas de lo que era para uno: un amor verdadero. Toca el tema de lo que estamos viviendo, momentos de incertidumbre, difíciles, y todos tenemos en nuestro corazón la manera de dejarlos en nuestro pasado.
¿En cuanto a la sonoridad, qué nos puede adelantar sobre este álbum?
Mi música siempre ha sido caribeña, pues toda mi influencia viene de parte de mi padre, Eduardo Cabas de la Espriella (compositor y músico), y yo transformé la música del Caribe con un sonido muy propio, que la gente reconoce como de Cabas. Esa mezcla del Caribe con sonoridades modernas, pasando por muchos géneros.
¿A qué obedeció ese proceso de limpieza que vivió en Belgrado?
Bueno, digamos que espiritualmente y emocionalmente necesitaba limpiar mi cabeza y mi corazón para seguir haciendo música. Yo llevaba promocionando mi música y estando en boca de los medios desde que tenía 19 años y se había convertido en mi vida, pienso que me había intoxicado todos los sentidos, le había perdido la pasión a hacerlo, podía seguir haciendo música pero no me daban ganas de enfrentarme a la prensa, no me sentía físicamente bien. Había ido al doctor y tenía muchos problemas de salud, y decidí hacer un proceso de limpieza sobre ciertos aspectos de mi salud. Eso fue súper bonito, porque me llenó de cosas buenas, espirituales, y me dio un estado de salud óptimo para continuar y poder volver a la música.
¿Cuánto tiempo duró ese proceso?
Llevaba ya un tiempo, pero especialmente a partir del fin de año. Estuve un mes de viaje en ese tema.
¿Viviendo una cultura diferente, en un clima distinto, cómo le fue?
Era muy chévere porque nadie hablaba español, había mucho silencio, me tocaba escribir mucho. Fue una experiencia muy bonita, pero también dura porque allá estaba en invierno y extrañaba el sol, la calidez de la gente de uno, pero eso te hace extrañar tu país, el don que tienes, las cosas maravillosas de la vida. Fue lo mejor que pude haber hecho. Ahora estoy retomando todo gracias a los fans y a su apoyo.
Y cuándo piensa lanzar su libro autobiográfico, ¿ya hay fecha?
Sí, he escrito bastante. Y con Editorial Planeta pensamos lanzarlo en la Feria del Libro de Bogotá del próximo año. Siempre he escrito canciones, pero esto de escribir un libro es distinto, he estado escribiendo bastante y va por buen camino.
¿Cómo ha compartido con su hijo Simón en esta cuarentena?
Ha sido maravilloso, él está en clases de piano, tocamos juntos, cocinamos, armamos rompecabezas, juegos de mesa, vemos películas. Tenemos gustos similares. Estamos disfrutando y aprendiendo, tanto él de mí, como yo de él.
Causas sociales
Además de apoyar a Johana Bahamón, madre de su hijo Simón, en campañas de su fundación Acción Interna, Cabas ha hecho shows virtuales para apoyar a quienes están detrás de la logística de los conciertos, para un proyecto de cantarle y ayudar a la Amazonía y para la Fundación de Niños Sordos, donde su hermanito menor estuvo hace unos años. “Canto para las campañas que me piden. Tengo un set montado en casa”.